Durante el otoño llega a muchos cabellos un proceso más que habitual de caída y regeneración que en la mayoría de los casos es de lo más normal aunque a muchas de vosotras os asuste.
Sin embargo si este proceso de caída se alarga demasiado en el tiempo puede ser un síntoma de que a tu cabello le puede estar ocurriendo algo. En Trendencias Belleza queremos que anotes como uno de tus próximos objetivos de otoño el prestar atención a tu cabello, cuidarlo y mimarlo ahora más que nunca y por supuesto vigilar una caída excesiva para saber si se trata de un simple proceso de regeneración o es indicativo de algo más. ¿Quieres saber cómo?
Como ya os hemos comentado la caída otoñal del cabello puede ser un proceso pasajero y estacional del que no te debes alarmar aunque si es muy abundante y repetitivo durante todo el año puede repercutir en un comienzo de alopecia. Dependiendo de los casos, las causas y los síntomas tendremos un tipo de alopecia u otro, algunos de caracter irreversible y otros con posibilidad de recuperar el cabello perdido.
Alopecia Androgénica
La causa más común es la alopecia androgénica, sobre todo en los hombres, aunque también puede darse en las mujeres principalmente a partir de los 50 años con la aparición de la menopausia e incluso en edades más tempranas.
Este tipo de alopecia se produce cuando el cabello es especialmente sensible a la variación de niveles de hormonas endocrinas, debilitándose y haciéndose más fino hasta que se cae y no es reemplazado. En el caso de las mujeres se detecta principalmente por una pérdida de cabello por la línea central.
Este problema se trata de una alopecia practicamente irreversible, aunque hay tratamientos médicos que pueden ayudar a ralentizar el proceso de caída.
Alopecia Areata
Otra tipo de alopecia es la Areata cuyas causas aún no parecen muy definidas por la comunidad cientifica, pudiendo provenir de causas genéticas o bien por cuadros de estrés y ansiedad.
Se reconoce rápidamente porque se produce una pérdida de cabello por parches, no en una zona generalizada como ocurría en la alopecia androgénica. Este tipo de alopecia sigue en pleno estudio y en algunos casos se puede llegar a detener y en otros no.
Otros tipos de alopecia
Otro tipos de alopecias que podremos encontrar generalmente son la producida por los fármacos, la difusa o efluvio telógeno (producida por cuadros de ansiedad, enfermedades febriles o incluso el parto y que es completamente reversible) o la alopecia traumática o de tracción que es la producida por el abuso de peinados tirantes, peines metálicos y un cuidado inadecuado del cabello.
Más vale prevenir que curar
Dependiendo del caso los tratamientos pueden ser una buena opcion o una auténtica pérdida de dinero. Si tu cabello notas que se cae durante todo el año de forma exagerada y progresiva (no solo en otoño) y que se puede ajustar a alguno de los casos expuestos anteriormente, lo mejor será que te pongas en manos de un dermatólogo que te asesorará y diagnosticará la salud de tu cabello.
Aunque dice el dicho que lo único que detiene la caída del cabello es el suelo, si tu caída es tan solo estacional y tampoco excesiva lo que sí podemos hacer es prevenir y cuidar nuestro cabello al máximo para que al menos presente un mejor aspecto y evitar así caídas en un futuro por exceso de sebo o un mal cuidado.
Para ello es importante cuidar la alimentación introduciendo en nuestra dieta complementos como la levadura de cerveza (rica en vitamina B y minerales) y alimentos como las almendras o el aguacate con un alto nivel de ácidos grasos esenciales y de vitamina B y E esenciales para el que nuestro cabello sano crezca fuerte.
Y es que el otoño es una época muy buena para cuidar nuestro cabello por dos motivos, el primero recuperar el cabello que se puede haber dañado por el exceso de sol durante el verano y segundo para que ese cabello nuevo que empieza a germinar presente mejor aspecto que nunca.
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