Cuando en septiembre os conté de Hauting, la colección de Halloween de China Glaze, una de las cosas que más nos gustó fue el top-coat Ghoulish Glow, que brilla en la oscuridad. Pues bien, yo no pude resistir la tentación, así que os puedo contar qué tal me fue.
Os adelanto que Ghoulish Glow deja unas uñas geniales. Tiene sus detalles, no es perfecto, pero es muy divertido. También es difícil de fotografiar, de modo que os pido que consideréis estas fotos como referencia: el efecto final se ve y se nota, pero es más discreto que lo que veis aquí.
¿Cómo funciona? El efecto luminoso necesita “cargarse” de luz, ya sea de día o de una lámpara, para poder brillar y solo dura un rato, un poco más de 10 minutos. Pero basta ponerle luz nuevamente para que vuelva a “cargarse” y brillar. También brilla con la luz negra (ultravioleta).
Quizás parezca un poco extraño de decir, pero creo que es importante aclarar antes que nada, que la fluorecencia de este esmalte de uñas no es peligrosa. Y además, de acuerdo a su lista de ingredientes, Ghoulish Glow es 5-Free.
Mi experiencia con Ghoulish Glow
Ghoulish Glow es un top-coat que no da color, a diferencia de Zom-body to Love de Opi, que pinta de color verde jade. Se le puede usar encima de cualquiera de nuestros esmaltes favoritos, pasando completamente desapercibido hasta que se apagan las luces.
En estricto rigor, lo que dije el párrafo anterior no es del todo cierto. Una sola capa de Ghoulish Glow sí es imperceptible, desgraciadamente tanto en la luz como en la oscuridad. Hay que poner mucho top-coat para que sea brillante y se note bien, más o menos tres capas gruesas, que aclaran bastante el color base: en la foto un poco más abajo, el color original era un gris oscuro similar al del fondo.
Tanta cantidad de esmalte tiene dos efectos desagradables. El primero, como ya habréis adivinado, es que demora mucho en secarse. Mientras me tomaba las fotos me pasé a llevar un par de dedos y a pesar de haberlos pintado unos buenos 5 minutos antes obtuve un par de grandes borrones, que se ven perfectamente en la foto a oscuras.
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¿No notáis nada raro en esta foto?
El segundo problema es el acabado del esmalte, que deja unos granitos que en una capa casi no se notan, pero que en tres crean cierto efecto “nevado”, como si llevara minúsculas purpurinas blancas.
En cuanto al precio, a mí me costó 6 dólares, un poco más de 4 euros. Eso sí, creo que esta marca no se vende físicamente en España, de modo que hay que recurrir a los sitios de venta online, donde lo vi por unos 7 euros más gastos de envío.
En conjunto estoy muy satisfecha con Ghoulish Glow: que deja un efecto diferente y atractivo que no solo sirve para Halloween, sino para cualquier ocasión nocturna.
¿A vosotras qué os parece?
Más información | ChinaGlaze.com
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