Cada vez son más los casos de piel atópica, un problema que se da tanto en hombres y mujeres, como en bebés y niños, siendo en la edad adulta las mujeres más propensas a padecer esta molestia que afecta a la piel del cuerpo, el rostro y/o el cuero cabelludo. Pero ¿qué es una piel atópica y cómo podemos aliviar los incómodos síntomas que tiene asociados? Hoy, en Cuidado NIVEA, te contamos todo lo que necesitas saber para responder a esta pregunta.
¿Qué características tiene una piel atópica?
Una piel atópica se caracteriza por ser una piel seca, irritable, que incluso puede llegar a descamarse y a presentar grietas en los casos más graves. Un trastorno crónico que, si bien no podemos eliminarlo del todo, se puede aliviar con unos correctos cuidados que calmen y protejan la piel evitando así este malestar que conlleva.
Picor, tirantez, rojeces, irritación, deshidratación y sequedad... son algunas de las señales inequívocas que delatan un problema de piel atópica. Esta síntomatología puede agravarse por diversos factores tales como el clima, el estrés, la falta de sueño, una alimentación desequilibrada, fumar, la falta de ejercicio, causas hormonales o los cambios de temperatura entre otros.
¿Cómo la podemos cuidar?
Estas son algunas recomendaciones para aliviar la incomodidad en una piel atópica:
- Utilizar ropa de algodón, suave y transpirable.
- Llevar una alimentación equilibrada y practicar ejercicio de forma moderada.
- Intentar reducir el estrés con técnicas de meditación o yoga para evitar brotes y rascados.
- Dejar de fumar.
- Dormir bien, los expertos recomiendan unas 8 horas de media, un sueño reparador favorece la regeneración de las células epiteliales.
- Optar por una ducha en lugar del baño y no superar los 5-10 minutos de duración del lavado utilizando siempre agua templada, las temperaturas extremas resecan mucho la piel y pueden agravar el problema por pérdida de lípidos y alteración del pH.
- Elegir siempre productos cosméticos adecuados para el cuidado de la piel atópica.
Para proteger, prevenir y aliviar la falta de confort propias de la piel atópica es necesario utilizar productos altamente hidratantes, respetuosos con la piel y que calmen el malestar propio de la atopía. La línea Repara & Cuida de NIVEA asegura una óptima hidratación, logrando una piel más elástica, calmada y suave.
La importancia de una buena hidratación
Las pieles atópicas lo que necesitan sobre todo es mantener la humedad en la piel pues la deshidratación es el primer paso en la escala sintomática que desencadenaría incomodidad, tirantez, rojeces, descamaciones y en algunos casos, zonas que pueden presentar grietas. Esta gama específica de NIVEA, creada en colaboración con expertos dermatólogos, lo que hace es aliviar y reparar de forma inmediata esa sequedad en la piel manteniendo eficazmente la hidratación de la misma evitando así que afloren el resto de problemas asociados a la piel atópica o los llamados brotes. La piel se mantiene elástica, confortable y calmada, llegando a durar hasta 48 horas este efecto hidratante.
Para lograr que la piel quede protegida y reparada de inmediato, la gama de productos Repara & Cuida cuenta en su fórmula con dos potentísimos activos: Dexpantenol, que tiene propiedades hidratantes, calmantes y antiinflamatorias además de favorecer la regeneración celular, y la exclusiva tecnología Hydra IQ, un ingrediente presente en todos los productos corporales de NIVEA, que potencia la hidratación de la piel en las capas más profundas de la epidermis.
¿Y para aliviar las molestias?
Estas son las claves a tener en cuenta en tus rutinas diarias, que te ayudarán a aliviar las molestias de la piel atópica:
- Después de la ducha no frotes la piel con la toalla, realiza pequeños toques con ella para secarla suavemente.
- Aplica tu crema o loción hidratante cuando la piel esté todavía húmeda, de este modo quedará más hidratada.
- El sudor agrava los síntomas en la piel atópica, intenta no abrigarte demasiado para evitarlo.
- En la ducha utiliza únicamente limpiadores suaves que cuiden la piel.
- Mantén las uñas cortas si el picor es intenso y las tentaciones de rascar la piel se vuelven incontrolables, incluso puedes utilizar guantes de algodón para evitar dañar la piel por la noche con el rascado.
- Evita posibles alérgenos que puedan empeorar el problema.
- Es recomendable el uso de un humidificador en casa para aliviar los síntomas.
Recuerda siempre que en casos extremos cuando la piel no responde a los cuidados, presenta infección o tienes fiebre, es necesario acudir al médico para que valore el caso concreto.
Aunque la piel atópica es muy delicada y frágil, con productos adecuados, como la línea Repara & Cuida de NIVEA , manteniendo un estilo de vida sano, el estrés a raya (en la medida de lo posible) y mimando mucho la piel, los síntomas pueden minimizarse y controlarse, y hacer del día a día un ritual de cuidados de lo más placentero para que te vuelva a gustar estar en tu piel. ¿Y tú los has probado? ¿Qué te han parecido?
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