Cuesta creerlo en pleno siglo XXI, pero la terrible realidad es que todavía hay países en el mundo en el que las mujeres apenas tienen más derechos que un niño pequeño o que un animal.
Lugares en los que son tratadas como moneda de cambio, vendidas como esclavas o como esposas. Según el UNODC Global Report del año 2016 realizado por Naciones Unidas las grandes víctimas de las redes de tráfico humano en el mundo son las mujeres y los niños, hasta un 71%, y el destino de la mayoría de ellas es convertirse en esposas o acabar como esclavas sexuales.
Se ha estimado que hasta 140 millones de menores de 18 años -estamos hablando de 39.000 al día- han sido o serán obligadas a contraer matrimonio sin su consentimiento entre el año 2011 y el 2020. El matrimonio forzado ha sido identificado por Naciones Unicas como "una forma contemporánea de esclavitud", y al contrario que lo de se piensa no solo se da en el Sudeste Asiático o en África, también ocurre en países como Estados Unidos.
Hemos consultado los datos recogidos sobre este terrible hecho en artículos, estudios, investigaciones, etc. para saber lo que vale una mujer en algunos lugares del mundo.
En India: desde 73 euros
Comprar una prometida en la India es una práctica que todavía se lleva a cabo en múltiples regiones del país como Haryana, Jharkhand y el Punjab. De hecho, según el estudio Human Traffficking: Prices and Statistics of The Modern Day Slave Trade por la organización Havocscope (una organización que se dedica a estudiar el mercado negro con datos que recoge de agencias gubernamentales, estudios académicos, reportajes de los medios y fuentes propias), las mujeres son compradas, vendidas, secuestradas, casadas sin su consentimiento y son objeto de tráfico.
Los precios de estas prometidas rozan las 5.000-30.000 rupias (entre poco más de 73 y 551 euros) y reciben el nombre peyorativo de paro o molki (esto último literalmente significa "la que tiene un precio").
Incluso se venden niñas por precios como 10.000 rupias (unos 150 dólares). Para hacernos una idea mejor, comprar un búfalo cuesta 293 euros, más que algunos seres humanos.
La necesidad de comprar una esposa tiene como origen la escasez de mujeres en el país. Estamos hablando de un ratio de 927 mujeres por cada 1.000 hombres. Una diferencia consecuencia del aborto femenino selectivo y de que las familias prefieren tener niños a niñas.
Pero no solo se compran mujeres para convertirlas en esposas, también para trabajar como criadas, como jornaleras o, peor aún, como esclavas sexuales o esclavas simplemente, que pueden volver a ser vendidas una y otra vez por traficantes.
En China: unos 2.600 euros
Comprar una esposa es una tradición en este país a la que el gobierno chino ha intentando poner fin pero que sigue llevándose a la práctica en las zonas más rurales.
La Academia China de Ciencias Sociales ha estimado que para el año 2020 habrá entre 30.000 o 40.000 hombres en China que serán incapaces de encontrar una mujer en su propio país.
Al igual que en la India estamos hablando de un ratio mujeres-hombres muy descompensado y en muchos casos hay una gran desesperación por conseguir una esposa. En este caso, la explicación es conocida sobradamente, debido a la política de “un único hijo” que practicó el gobierno durante años y que tuvo como resultado abortos selectivos.
Muchas de las esposas que se venden proceden de países como Laos, Vietnam y Corea del Norte y dependiendo de su aspecto físico pueden acabar siendo vendidas como esclavas sexuales por los traficantes. Estamos hablando de precios que pueden llegar hasta los 2.600 euros.
En Malasia: a partir de 4.800 euros
China no es el único destino para los traficantes que comercian con mujeres. La policía de Malasia consiguió acabar con una red de traficantes que vendía mujeres a hombres malasios para que fueran sus mujeres o esclavas sexuales por cantidades entre los 18.000 ringgit malasios (unos 4.800 euros) y los 20.000 (5.400 euros).
En Vietnam: unos 4.774 euros
La policía de Vietnam lleva años luchando contra una red de tráfico de humanos que vende mujeres vietnamitas como esposas en China. De acuerdo con noticias como esta, hay hombres que están pagando 120 millones dongs vietnamitas (4.774 euros) por una mujer.
Estamos hablando de un tráfico entre ambos países que se ha incrementado a lo largo de los últimos años: sólo entre el año 2009 y el año 2013 los servicios de seguridad chinos han rescatado a 1.800 mujeres vietnamitas y a 41 niños que estaban siendo llevados a China.
En Camboya: a partir de 3.600 euros
El tráfico de mujeres en este país también está orientado al mercado chino también y son numerosas las operaciones en las que se han detenido a mafiosos intentando pasar mujeres por la frontera para su venta en China. En uno de los artículos que hemos encontrado, el traficante confesó que iba a cobrar entre 3.600 y 6.700 euros por cada una de las mujeres bien para que fueran esposas o esclavas sexuales.
En Afganistán: desde 1.212 euros
Las bodas son un asunto realmente caro en Afganistán pero no porque se pague un precio excesivo por una tarta de cinco pisos o un precio desorbitado por un vestido de lujo. Lo que realmente cuesta mucho dinero en este país es el precio que se paga por una esposa, algo que no se debe confundir en ningún caso con la dote (que es el dinero que se le suele dar a la prometida si el marido fallece o se divorcia).
Pagar por una novia puede llevar a las familias y a los prometidos a la ruina o a pedir créditos. En una investigación realizada para Afghanistan-analysis.org en el año 2016, Fazal Muzhary descubrió qué cifras se pagaban en diferentes lugares del país para conseguir una mujer. Las más bajas se pagaban en la provincia de Nangarjar, 100.000 afganis (unos 1.212 euros), y las más altas en áreas como Kandahar y Helmand, donde una mujer podía llegar a costar 3.000.000 de afganis (casi 36.000 euros).
En Sudán: a partir de 20 vacas.
Según el último estudio realizado por el gobierno sudanés en el año 2010, hasta un 17% de las mujeres que se casan en este país lo hacen antes de cumplir los 15 años. Y muchas de ellas son objeto de comercio por sus familias como si fueran ganado doméstico y, lo que es más, se suelen intercambiar por vacas. Hasta 20 o 40 vacas, con un valor de unos 408 euros cada una, aunque si la joven en cuestión es de buena familia, bella y fértil puede llegar a costar hasta 200 vacas, según podemos leer en el mismo artículo de Los Angeles Times.
En Egipto: aproximadamente 1.600 euros
En este país nos encontramos con una ley inusual que regula algo denominado como "matrimonios temporales", pero que en opinión de las autoridades es una manera de permitir a las familias más pobres vender a sus hijas para casarlas temporalmente con hombres extranjeros como único medio de supervivencia. La gran mayoría de estos hombres proceden de países del golfo y están dispuestos a pagar dinero para casarse con mujeres mucho más jóvenes que ellos y tenerlas a su lado los meses que dure su estancia en Egipto. Como podemos leer en este artículo se pueden llegar a pagar hasta 1.600 euros por una esposa temporal.
En el sur de África: a negociar
En esta zona, miles de chicas, aún niñas de incluso 9 años, son secuestradas cada año con el objetivo de casarlas sin su consentimiento. Los secuestradores suelen abusar de ella sexualmente para convertirlas en sus "prometidas", practicando una costumbre conocida como ukuthwala. En muchas ocasiones esta terrible costumbre está justificada porque pagan a sus padres, ya sea en forma de dinero o de bienes materiales, una distorsión de la tradicional dote, que allí recibe el nombre de ilobolo o lobola. Las familias que viven en la pobreza muchas veces son cómplices de esta violación de los derechos humanos. E incluso hay aplicaciones en el mercado para calcular lo que cuesta una esposa, con cabezas de ganado como moneda de pago y que utilizan como criterio variables como la altura, el perímetro de la cintura o el nivel de atractivo de la futura esposa.
En Estados Unidos: a negociar
En el año 2011 la organización Tahirih Justice Center realizó un estudio a nivel nacional sobre los matrimonios forzados entre las comunidades de inmigrantes de Estados Unidos y hasta un 41% de los proveedores de servicios sociales estadounidenses reportan haber contado al menos un caso de matrimonio forzoso en un período de dos años, recabando un total de 3,000 casos.
Parece una cifra enorme, pero además estos números no tienen en cuenta al resto de la población ni tan siquiera las prácticas realizadas en comunidades ultra-ortodoxas que podemos encontrar en el país. La encuesta también llegó a la conclusión de que solo un 16% de estas organizaciones estaban equipadas para tratar estos casos. En estos casos no hemos podido recabar datos sobre si se paga un precio por estas mujeres y a cuánto asciende.
Fuente Principal| Human Traffficking: Prices and Statistics of The Modern Day Slave Trade. A Havocscope Report.
Fotos| Pixabay.com, Wikipedia Commons
Ilustración| Victor JG Gómez
En Trendencias| Historia de la violencia de género en España. Datos y leyes para entenderlo de un vistazo
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