Las galletas saladas, también llamadas en ocasiones crackers, son un snack muy habitual. Nos sirven para acompañar un picoteo, como aperitivo o para llevarnos algo a la boca entre horas. Pero como con cualquier producto, lo mejor es hacerlo en casa para evitar añadir grasas saturadas o sumarle calorías en exceso.
Te damos once ideas de galletas saladas o crackers que puedes hacer en casa de forma sencilla y que te servirán para como base de tus aperitivos, para acompañar untables, cremas, patés o quesos, o simplemente como un snack casero lleno de sabor.
No necesitas demasiados ingredientes para hacer unas galletas saladas saludables, divertidas y deliciosas con las que acompañar un picoteo por ejemplo, el fin de semana. Son perfectas para acompañar una tabla de quesos, por ejemplo, y tienen su origen en Escocia, aunque son muy populares en toda Gran Bretaña.
Galletas saladas de sésamo y parmesano
Aunque la receta original lleva sésamo, desde Directo al Paladar nos indican que podemos cambiarlo por una hierba aromática como el tomillo o el delicioso orégano que tan bien combina con el parmesano. Una receta sencilla de la que podremos sacar muchas versiones cambiando ese ingrediente.
Crackers de harina de garbanzos
Sin gluten, vegana y saludable, no podemos pedir más. Estas galletas saladas de harina de garbanzos son tremendamente sencillas y no necesitan demasiados ingredientes porque como base se usa agua, aceite de oliva y harina. Los condimentos para darle sabor y aroma pueden ir variando a nuestro gusto, y añadir semillas para darle un mayor componente nutricional.
Crackers de semillas y avena
De nuevo repetimos con receta saludable de Vitónica que nos propone una receta sin harinas, unas galletas saladas muy crujientes de semillas y avena. Aunque pueden disfrutarse como un snack saludable, podemos** acompañar un hummus con estas galletas** o incluso servirlo con queso. Una delicia.
Galletas saladas de nueces, parmesano y aceitunas negras
Aunque es una receta ideal para hacer con Thermomix o con cualquier otro procesador de alimentos, puedes amasar a mano sin ningún problema. Para evitar que nuestras galletas saladas de nueces, parmesano y aceitunas negras se ablanden, lo mejor es guardarlas en un recipiente hermético que las conserve toda la semana.
Biscotes crujientes de frutos secos
No solo son visualmente deliciosos, estos biscotes son un bocado lleno de energía para comer antes o después de nuestro entrenamiento en casa, por ejemplo. No necesitan acompañamiento, pero combinan de maravilla con untables, patés o quesos.
Crackers crujientes de garbanzo y zaatar
Unos crackers crujientes y deliciosos hechos con legumbre. Aunque llevan especias zaatar, una mezcla de especias y hierbas típica de la cocina árabe y originaria de Oriente Medio, podemos sustituirlo por curry si es que nos cuesta encontrar esta exótica mezcla, o incluso probar con cinco especias chinas o algún garam massala indio.
Galletas saladas de queso y curry
Para esta receta suiza, lo más importante es contar con una buena mantequilla y un buen queso, que puede ser sbrinz, un curado típico del país, o si nos cuesta encontrarlo, un buen parmesano. Y aunque son algo más calóricas que el resto de las recetas que te proponemos, también deliciosas y perfectas para darnos un capricho el fin de semana.
Crackers fáciles con placas de canelones
Si lo que buscas es una receta sencilla (sencillísima) y olvidarte de amasar, esta opción es la tuya. Estos crackers con placas de canelones son más que fáciles, porque la masa que usaremos para ellos no es otra que la pasta que compramos para hacer unos canelones de carne, por ejemplo. Y el resultado es espectacular.
Galletas saladas de cúrcuma
Este tipo de galletas saladas no solo tienen un aroma exquisito gracias a la cúrcuma, sino que aportan un toque diferente patés de pescado, por ejemplo, como este paté o crema de atún que podemos hacer en casa.
Crackers de espelta
Estos crackers de espelta son sanos y muy saciantes y, gracias a las semillas, tienen un alto valor nutricional. Son un perfecto snack saludable aunque como base para otros platos es ideal. Podemos acompañar, por ejemplo, un salmón marinado casero, o usarlo junto a unos crudités de verduras con cualquier tipo de hummus.
Fotos | Vitónica, Directo al paladar
