El plátano es una de esas frutas que se infravaloran. Pensamos que engordan y la realidad es que se trata de un alimento rico en fibra, sin muchas calorías y con una gran capacidad saciante. De hecho es uno de los alimentos que más saciedad y contiene sustancias con efecto prebiótico que influyen de forma muy positiva en la flora intestinal como señala un estudio publicado en la revista científica Anaerobe.
Tiene potasio, vitaminas del complejo B, magnesio, vitamina A y carotenos, como nos explican los expertos de Vitónica, y es perfecto para incluir en nuestra dieta durante todo el año. Pero en verano lo que nos apetece es algo fresco como la sandía, así que tenemos la solución para que sigas comiéndolo aunque haga un calor de mil demonios: un helado de plátano y chocolate.
Es imposible conseguir un helado más rápido, fácil y sano que el que te traemos a continuación. Lo puedes tener listo en dos minutos y sin heladera, lo que es un gran plus porque nos ahorramos mucho tiempo, pero no perdemos nada de cremosidad. Y no lleva nada de azúcar añadido, así que estamos ante el postre perfecto para el verano.
Cómo hacer un helado sano de plátano y chocolate
Solo necesitamos dos plátanos, medio vaso de leche, una cucharada de cacao en polvo desgrasado y sin azúcar, y un poco de extracto de vainilla. El truco aquí es que vamos a pelar los plátanos y cortarlos en rodajas para meterlos después en el congelador en una bolsa bien cerrada. Y no tires la piel, podemos usarla y tiene muchísimas propiedades.
Tener plátano congelado siempre en nuestro congelador, es una forma perfecta de evitar que se pongan malos cuando los compramos (aunque con este truco te durarán hasta 15 días sin ponerse negros).
Cuando el plátano esté congelado lo colocamos en el bol de la batidora o de una procesadora de alimentos y añadimos el resto de ingredientes. Así de sencillo. Batimos hasta conseguir una textura cremosa y ya estaría listo. Podemos decorarlo con más cacao en polvo, virutas de chocolate, crocanti de avellana o de almendra, coco rallado o tomarlo sin más.
También puedes probar con este helado cremoso de plátano, añadiendo al plátano congelado 20 ml de mantequilla de cacahuete natural sin azúcar y sin sal. Batimos y listo. El plátano congelado nos puede servir también para hacer un helado de fresa y plátano de la misma forma pero reduciendo la leche y añadiendo fresas también congeladas. Cuando lo pruebes, no habrá vuelta atrás, porque está tan rico que repetirás seguro.
Fotos | Eiliv Aceron en Unsplash, matthew Feeney en Unsplash
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