A la vez que vemos algunas de las propuestas por parte de las marcas para vestir esta Navidad, nos planteamos la duda de cómo ir arreglados para salir de fiesta esos días y la barba juega un papel fundamental.
La duda está si en dejárnosla o en afeitarla hasta que desaparezca. Cada opción nos da un estilo diferente y también hay tantas variaciones como uno se pueda proponer. Pero con ¿cuál nos quedamos al final?
Al ir afeitados, dejamos el rostro limpio y resaltamos más nuestros rasgos faciales. Suele ser lo habitual en todo tipo de eventos y es considerado por muchas personas como gesto de que un hombre se cuida.
A muchas mujeres les gusta más los hombre sin barba que con ella y más en un día como estos, donde el traje es el uniforme a lucir y hay que ir como un pincel. Aunque también está el caso contrario... no se puede generalizar.
En el lado opuesto está el ir con barba. Esto tiene sus complicaciones para ir elegantes. O bien tenemos la barba bien cuidada y la repasamos muy bien antes de salir o mejor dejar el rostro limpio que con tres pelos mal puestos.
La barba de tres días a muchos les favorece, pero dependerá del evento y del estilo en el vestir que elijan para ese día. Para ir como un pincel, esta opción hay que llevarla muy bien cuidada y arreglada, no es tarea fácil. Si no lo hacemos bien, podemos dar mala imagen.
En cuanto a perillas o bigotes también dependerá de si nos favorecen o más bien, como es el caso de Brad Pitt, parecemos una chiva.
Al final, la elección dependerá mucho de nuestro estilo diario y de qué nos favorece más.
¿Cuál es tu opción preferida?