Buscando una receta que me gustó y olvidé guardar de nuestros compañeros de Directo al Paladar, me topé con un artículo sobre la correcta utilización del pan en una mesa preparada formalmente.
Me hizo gracia recordar una anécdota sobre este protocolo tan fácil de recordar pero que, si no lo sabes de antemano, puedes sentirte como un pato mareado bajando de la noria.
Tener un comportamiento adecuado en situaciones especiales dice mucho de tu bagaje personal y da una satisfacción personal tranquilizadora de saber que lo que estás haciendo está bien (no como yo que me sonrojé de vergüenza).
Tuve la oportunidad de asistir a una cena formal, aunque en esa mansión cualquier cena es formal. Imagino además que esa mesa supuestamente formal lo era para mí pero más bien informal y entre amigos para el resto de comensales. Dicho lo cual, nunca sabes lo que te vas a encontrar siendo la invitada y mejor ir preparada.
Cuando vi todo el despliegue de platos, copas y cubiertos quise salir corriendo por la salida de emergencia. Lo que más me intrigaba era ese platito blanco situado a la izquierda de mis copas y a su misma altura. En esos casos, lo mejor es esperar a que los otros empiecen y observar y seguir su conducta.
Para que se me pasase un poco el yuyu, empecé a comer cachitos de pan (eso lo hice bien, trocitos pequeños), y el ambiente de la cena empezó a relajarse. Sirven el primer plato y vuelvo a acordarme del platito. ¡Ay madre mía! Los demás ya habían empezado a utilizarlo y ¡era para el pan!.
No hace falta que os describa el sofoco que me dió cuando, lo más discretamente posible, trasladé el pan al plato auxiliar pero buena parte de las miguitas que obviamente hice (que no, que no estuve jugando con el pan: ahí todavía llegaba por aquella época joven) se quedaron a la derecha de mis copas y ... encima del mantel. ¡Pecadora! Eso nunca.
Aprendí ese detalle y ahora me río de la situación pero en aquel momento fue 'tierra-trágame'. Si estás en familia o amigos, no tiene tanta importancia pero en una comida formal de trabajo o social, vale la pena saber esos detalles, como que debes cortarlo únicamente con los dedos o que debes evitar mojar la sabrosa salsa.
Te recomiendo ller el artículo completo de Velsid para más detalles: crea que te gustará.
En Embelezzia | Qué hacer si alguien mezcla tu vino de crianza con gaseosa En Embelezzia | En Francia, guarda espacio entre los platos y el postre En Directo al Paladar | El pan y su correcto uso en la mesa