Hace un par de años saltaba al ruedo la noticia del cierre de uno de los mejores restaurantes de la capital. Sus habituales se reunieron y el templo gastronómico por excelencia de Madrid no sólo no cerró, sino que renovó su aspecto de la mano del decorador Ignacio García de Vinuesa.
Ahora, la dirección del restaurante lanza una nueva propuesta a imagen y semejanza de los grandes restaurantes franceses como Taillevent, L’Arpègè de Alain Passard o L’Astrance de Barbot, quienes ofrecen en su carta un menú lunch, con creaciones de los grandes chefs más livianas y adaptadas al día a día.
Jockey, crea el "Jockey Lunch". Una oferta gastronómica diseñada para satisfacer las necesidades reales del público actual, que demanda comidas menos copiosas en el día a día o comidas de negocios.
Servido de lunes a viernes a mediodía, incluye un primero y un segundo. Entre las propuestas del chef Esteban Sánchez, algunas de sus especialidades como la ensalada verde con alcachofas y espárragos, el revuelto "dodero" con patatas paja, la poularda asada con manzana, ciruelas y pasas o los escalopines de ternera vienesa.
Y para terminar, el cliente puede elegir entre tres postres: peras al vino tinto con helado de canela, espuma de yogurt griego con sorbete de frambuesa o mouse de chocolate con naranjas amargas. Además para maridar estos platos el menú incluye vino tinto o blanco, así como agua, cafés e infusiones. Una opción muy acertada para el público business de la capital.
Jockey se adapta así a las nuevas tendencias sin renunciar a su estilo elegante de Club Inglés. En el local suelen verse desde jóvenes empresarios hasta personalidades del mundo de la cultura y la política, grupos de amigas y la nueva hornada de la jet social madrileña.
¿Quedamos en Jockey?
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