Pensando en quienes viajan siempre acompañados por sus mascotas, al Museo Ferrari de Maranello se le ha ocurrido una original idea, muy en consonancia con sus señas de identidad, y con el lugar donde se encuentra ubicado.
Todos las personas que acudan hasta allí para visitar sus instalaciones y los magníficos coches allí expuestos podrán dejar a sus amigos de cuatro patas en un estupendo jardín, situado detrás de la cafetería, bajo la atenta mirada de unos cuidadores que no los perderán de vista.
Para que los perros, que han nacido con vocación escapista, no pongan en peligro su seguridad, han diseñado para ellos una serie de gabbie - como allí las llaman -, inspiradas en algunos de los clásicos fabricados en Maranello.
Existen en tres tamaños diferentes, fabricados en función de las tres tallas más habituales de razas caninas. Estos modelos han sido oportunamente retocados para que nuestras mascotas puedan experimentar la sensación de ir dentro de un Ferrari.
Con esta iniciativa, la casa del “cavallino rampante” propicia una experiencia muy ligada a su tradición, que se evidencia aún más en esta serie de servicios para los visitantes de su museo. Meca de peregrinaje para miles de personas, que suelen viajar hasta el lugar, para disfrutar de todas las maravillas expuestas en su interior como coches deportivos, de competición, prototipos, etc.
¿Nunca habías visto un perro al volante? Pues, a partir de ahora, nuestras mascotas también podrán vivir el sueño del Cavallino en el museo de Maranello gracias a las gabbie-Ferrari.
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