Champagne de viticultor: dícese del champagne de gran calidad elaborado por pequeños viticultores. Ésta es la última tendencia en España entre los que aprecian estas hipnotizantes burbujas y llegan reclamando su sitio de honor en la estantería al lado de los grandes.
También denominados champagnes de pago (nada que ver con monedas), segun los connaisseurs (es curioso que lo escriban en francés en el mismo párrafo que champán) algunas de estas marcas poco conocidas están a la altura de los más reputados por el público gourmet.
La sutil diferencia está en una de las etapas del procedimiento final, el degüello. Esa pequeña cantidad de vino que se añade marca la diferencia. Las grandes bodegas como Möet & Chandon, Ruinart o Dom Pérignon no pueden permitirse rellenar con vino de unas mismas cepas y añada, cultivadas con pocos fertilizantes o, con más suerte, de manera ecológica.
Nuevas bodegas como Larmandier-Bernier o Jacquesson empiezan a subir como la espuma, con un público de adeptos importante en Francia, EE UU y Reino Unido. Los precios de estas botellas rondan los 40 o 50 euros, con una gran relación calidad-precio.
Pero para no dejarte llevar por el impulso de compra porque esté elaborada en unas viñas pequeñas y la producción anual sea limitada (no siempre garantía de calidad), déjate aconsejar por el experto de una tienda especializada, que hay muchos en España y pocas son las personas que los consultan.
Vía | El Pais.com En Embelezzia | Jeroboam mejor que Magnum, El brindis: coge tu copa de cava correctamente y brinda con estilo En Directo al paladar | ¿Qué son los vinos de pagos?