San Valentín se está acercando y hoy me adentro un poco en el universo masculino a ver si es posible desentrañar algo romántico (aunque me quedo con cartas sinceras en papiro y un cordel…) para un día muy especial y que nunca olvide.
Por eso, voy a mezclar un lugar que yo nunca olvidaré, la India, para llevar allí a mi San Valentín particular. Por cierto, las recomendaciones de Enric son realmente útiles, pero sobre todo la experiencia… ¡la India es espectacular!
Primero de todo, y aprovechando que aún hay nieve... ¿qué tal material deportivo para la montaña? Los skis Dunhill con control de velocidad serán un regalo perfecto para disfrutar manteniendo siempre el control sobre los movimientos. Además, así evitamos las lesiones tontas por caídas…
Para los hombres que quieran recordar sus años más infantes… no podía faltar el monopatín de Louis Vuitton. Además, él se queda con el monopatín y yo con la caja… ¡es perfecto!
Sé que hay mucho cromosoma XY que es fanático del motor… y como no podía ser de otra manera, un regalo con olor a gasolina siempre pone una sonrisa en quien lo recibe. Y si es Maserati... ¡quién puede resistirse! Es la nueva berlina de lujo, el Quattroporte GT S. Impresionante por dentro, por fuera, por los lados…
Poco a poco se van rompiendo mitos sobre las compras, y creo que una escapada a Dubai, a la Feria Internacional del Outlet de Lujopuede ser una grandísima sorpresa. Ferrari, viajes, joyas, esculturas, un mundo diferente… seguro que se queda boquiabierto al abrir los billetes a Dubai...
Los juegos de mesa son un clásico, y como tal, no podían faltar. El Monopoly de Lujoes una gran opción para esos hombres a los que les encanta conquistar el mundo, después de conquistar otros lares… incluso seguro que se pueden hacer versiones, como en el póker…
Regalar un viaje siempre tiene la ventaja de que es para dos, y como bien dice nuestra compañera Eva, de Diario del Viajero, Tahití puede ser una opción perfecta. Buceo, paseos, fotografía, pesca… calma, cabañas idílicas… y muuuuchos mimos para ellos, que también los necesitan y les encantan aunque no lo digan muy a menudo.
Creo que para este San Valentín estoy más viajera que nunca, pero descubrir lugares nuevos en buena compañía es el mejor regalo que puede hacerse. Y como dice la canción, sea en el aire que sea… love is in the air...
En Embelezzia | San Valentín de Lujo
