Cuando ya no hay espacio en las tiendas para los últimos resuqucios de rebajas, es que la nueva temporada ya está aquí, y la colección de Zara Primavera-Verano 2010 ya ocupan hace días los colgadores de sus establecimientos. Fuera negros, fuera abrigos, fuera lana: bienvenidas flores, tonos empolvados, colores caquis y tierras, tops vaporosos, saharianas, rayas, y algo de piel pasajera.
¿Alguien se anima a estrenar a pesar de que aún falta bastante para la primavera?
Solamente por el coloridos ya dan bastantes ganas, y de un tiempo a esta parte, como sabéis, las colecciones son más de entretiempo que otra cosa.
Y por mucho que hablemos de propuestas de primavera-verano podemos encontrar prendas que podemos utilizar en cualquier otra época del año.
La inspiración militar es ya todo un clásico, y el estampado de camuflaje vuelve temporada tras temporada.
El verde bélico viene este año en forma de vestido como éste, que bien podría haber firmado Alexander Wang y estrenar Blake Lively en una de sus salidas nocturnas.
El impoluto blanco sigue siendo sin embargo el color estivo por antonomasia.
Haciendo una pareja perfecta con el azul marino en pro de looks estilo navy.
O combinado con crudos y arenosos en plan colonial Memorias de África.
A pesar de que la sahariana es la prenda estrella, el blazer sigue ocupando su lugar en el podio y tirunfan en forma principalmente cruzada y de levita (a ver cuanto tarda Olivia Palermo en estrenar uno de estos modelos).
Y sigue viniendo además con rayas.
Los pantalones siguen siendo de talle muy alto. Y como ya dijimos al ver las primeras imágenes del catálogo; la influencia de Chloé, y del Céline de Phoebe Philo, es más que obvia.
¿El calzado estrella? Tal y como mandan los cánones impuestos por Chanel y Louis Vuitton, entre otros: los zuecos.
Sitio oficial | Zara
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