Hoy en este nuevo capítulo del Tal como Éramos un repaso a la historia del cine, la que dejó huella en la moda como pocas y que muchas décadas después sigue dando que hablar, siendo imitada y alabada. Audrey Hepburn no podía estar más deliciosa en Desayuno con Diamantes y su vestido de Givenchy no podía ser más perfecto. ¿Es cosa del pasado? No, más bien una genial idea para las próximas fiestas navideñas.
Quizás ya sabéis que un vestido de corte sirena con hombro al descubierto en negro es perfecto, que acompañarlo de los collares de la temporada es una idea sencillamente exquisita y que si la fiesta es muy glamourosa o sofisticada lo mejor es acompañarlo de un recogido, como un italiano, pero para no excedernos, un pelo más informal es más adecuado.
Lo que quizás no sabes es que a veces el acompañante ideal no es el que esperas, ni mucho menos. El de Audrey Hepburn en la película era José Luis de Vilallonga, sí, el rico adinerado brasileño que la deja plantada. Yo os recomiendo sin dudar su biografía, una genial e hilarante historia que habla desde por qué y cómo participó en la película hasta cómo era Marilyn Monroe o lo poco que comían los Ferrer (Audrey y marido), el motivo por el que se fue de su casa en el que estaba como huésped. Un personaje por descubrir.
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