Cuando he visto estas fotos, esta campaña, me he preguntado, como Madonna cantaba hace tantos años: ¿quién es esa chica? o más bien ¿qué tiene esa chica? La duquesita pone su cara y sonrisa con hoyuelos a bolsos y zapatillas, a lo más alto y caro y a lo más cercano al suelo y asequible. En este caso hablamos de la Campaña Otoño-Invierno de la firma Kelme.
Sin duda debe funcionar, porque si no, que me expliquen qué pinta en esta campaña, casual, sport, campestre, deportiva ¿asociaríamos alguno de estos adjetivos con ella? No y tampoco nos la presenta de un modo que nos sorprenda. Señores de Kelme, voto porque la próxima vez jueguen a un cambio de imagen a la manera de la campaña 12 horas, 12 mujeres de H&M. ¿Se atreven?
Ahora, el equipo es de quitarse el sombrero. En la lente, fotografiando a una sonriente y difícil, seamos claros, Eugenia Martínez de Irujo, Toni Bernad. Y en peluquería y maquillaje Piti Pastor, un encanto con quien he tenido el placer de coincidir en algunos trabajos.
No cabe duda de que la marca ha tirado la casa, o más bien el palacio, por la ventana para retratar a la hija de, ex de. Y no me cabe duda de que la cosa será del todo rentable. Pongan una duquesita en su vida y échense a dormir (o más bien a ganar), digo yo.
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