En los últimos meses, Instagram no ha parado de crecer: el éxito rotundo de sus stories, a las que ha añadido nuevas funcionalidades constantemente; las herramientas de prevención de suicidios o contra los trolls... Y, teniendo en cuenta que es la red social en la que reinan las influencers de moda, parecía previsible que Instagram diera un paso adelante para diferenciarse en este sector. Y ayer anunció cómo lo hará: en los próximos meses, se podrán comprar directamente los outfits que veamos en las publicaciones.
La idea se viene probando desde noviembre, con unas veinte marcas. Y parece que ha funcionado, ya que ayer se anunció que Instagram está preparado para expandir el programa a miles de marcas de moda, complementos y productos de belleza.
El funcionamiento de la nueva funcionalidad será sencillo: en lugar de etiquetar a la marca en las prendas, como hasta ahora, se podrá etiquetar directamente el producto. Pinchando sobre nuestro objeto de deseo, aparecerá el diálogo emergente «comprar ahora», que nos remitirá directamente a la página de venta del producto.
Si con sus stories se dijo que Instagram quería hacerse con el público de Snapchat, ahora parece querer cubrir el sector de mercado de 21 Buttons, la red social pionera en la compra directa de outfits de las influencers de moda.
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