Los entrenamientos de alta intensidad son nuestros favoritos cuando buscamos ponernos en forma y activar todos los músculos del cuerpo, ejercicios con los que poder derrochar energía y, por supuesto, conseguir resultados notables en poco tiempo. No nos extraña que este tipo de entrenamientos formen parte de muchas de las rutinas de las celebrities, ya que tienen todo lo que se le puede pedir a un buen circuito fitness, cardio, intensidad y por supuesto una sensación final que nos deja completamente renovadas.
Sabemos que, quizás, para las fans de las caminatas diarias un entrenamiento de estas características no les llama tanto la atención como un largo paseo. Por ello, actividades como el HIIT walking están cogiendo tanta fama, ya que aúna todos los beneficios de dicho ejercicio de bajo impacto pero que podemos también convertirlo en un entrenamiento de alta intensidad añadiéndole intervalos.
A través de dicho entrenamiento a base de intervalos de alta intensidad (HIIT), ayudaríamos a reducir calorías y mejorar nuestra capacidad cardiovascular. Y es que, este tipo de disciplinas apuestan por alternar ejercicios de alta y baja intensidad, algo que ayuda a acelerar el metabolismo. Ahora podemos incorporar esta dinámica a nuestra caminata diaria, bastaría con ir cambiando el ritmo, generando de esta forma nuestros propios intervalos.
Con la llegada del calor, no hay nada que nos guste más que la idea de apostar por un entrenamiento fitness fuera de casa, de ahí que el HIIT walking sea la opción perfecta para disfrutar de una buena caminata con un extra de intensidad. Para ejecutarla de forma correcta, podríamos apostar por andar 5 minutos como calentamiento, luego 1 minuto caminando rápido y descansar entre 30 segundos y 1 minuto. Por último repetir dicha dinámica entre 8 y 10 veces.
Otro ejemplo podría ser empezar caminando 4 minutos a un ritmo constante, siguiendo nuestro ritmo habitual a la hora de salir a caminar. En el siguiente intervalo, tomaríamos impulso para llevar a cabo una caminata rápida de 2 minutos, involucrando todo el cuerpo, moviendo también los brazos.
Tras este intervalo, notaremos como aumenta nuestra frecuencia cardíaca. Es el momento de volver al ritmo de inicio durante dos minutos, para dar a nuestro cuerpo una especie de descanso antes de pasar al siguiente nivel. Tras dicho tiempo, empezamos con la fase más intensa en la que caminaremos durante 1 minuto a un ritmo más rápido. Así ponemos el broche de oro completando nuestro entrenamiento HIIT de 10 minutos. ¿Lo mejor?, que podemos volver al principio y repetirlo las veces que consideremos. Un must a la hora de quemar calorías este verano.
Fotos | Andrea Piacquadio en Pexels, cottonbro studio en Pexels
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