Entre las reuniones con amigas y los reencuentros navideños, muchas hemos pensado en posponer nuestra rutina fitness un par de semanas. Parece que el tiempo corre a una velocidad vertiginosa y casi no tenemos minutos en el día que dedicarle a nuestro cuerpo. Pues ahora ya no hay excusa, porque la experta en yoga Xuan Lan ha compartido tres asanas que puedes seguir desde la comodidad de tu casa y que son ideales para las que siempre vamos a todas partes a contrarreloj. En definitiva, la opción perfecta para no abandonar la rutina deportiva en estas fechas.
Aunque puede que hayas frecuentado unas cuantas clases de yoga, seguramente no sepas por qué asanas decantarte para seguir una rutina exprés desde el salón de tu casa, o en su defecto, si eres nueva en esta disciplina, no tengas mucha idea de por dónde empezar. Para ello Xuan Lan apuesta por encontrar unos 15 minutos al día para nosotras y seguir estos tres asanas especialmente efectivos, donde no dejaremos un músculo sin trabajar.
Malasana
Empezamos esta corta sesión de yoga con la postura de la malasana, ideal para estirar el cuerpo y trabajar el core. Para ponerla en marcha, nos colocamos sobre el mat de yoga de pie, con ambas piernas separadas a la altura del ancho de nuestras caderas. Seguidamente, flexionamos las rodillas como si fuésemos a hacer una sentadilla e inclinamos el tronco hacia a delante. A continuación, apoyamos nuestros codos sobre la cara interior de las rodillas, manteniendo nuestra columna recta. Finalmente, nos quedamos en dicha posición durante mínimo 30 segundos.
Torsión sentada
En este ejercicio, nos colocamos sentadas en la colchoneta. Desde ahí, pasamos nuestra pierna derecha por encina de la izquierda, la cual se queda estirada y bordeamos con nuestro brazo izquierdo la rodilla derecha, todo ello mientras llevamos la mano derecha al suelo por detrás de la espalda. Seguidamente, giramos el tronco hacia el lado derecho y nos mantenemos en dicha posición durante varias respiraciones. Repetimos la misma estructura con la pierna izquierda y el brazo derecho.
Postura del árbol
Para el último asana de la serie, colocamos los pies separados a la altura de las caderas y llevamos todo el peso del cuerpo sobre el pie derecho, todo ello mientras levantamos el izquierdo del suelo y doblamos la rodilla, dejando la planta del pie sobre la parte interna de nuestro muslo derecho. Continuamos estirando la columna y llevamos los hombros hacia atrás y hacia abajo. Finalmente, juntamos las manos a la altura del pecho y las colocamos en posición de oración.
Además de trabajar la fuerza del core, así como la de las piernas, esta postura es especialmente un must para mejorar el equilibrio de nuestro cuerpo, y es que no solo estaríamos trabajando la elasticidad de nuestros músculos, sino que también sería todo un acierto para tonificar la zona y ganas fuerza. ¿Lo mejor? Que puedes hacerlo estas fiestas desde casa. ¡Toma nota!
Foto | Elina Fairytale en Pexels
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