El aceite de oliva virgen extra es sin duda uno de los ingredientes joya en nuestras cocinas. Su disparo de precios este último año no ha sido la única razón por la que nos referimos a él de forma constante como "oro líquido", y es que su amplia lista de propiedades hacen de este producto un must en nuestras comidas, ya sea para mezclar con ensaladas, añadirlo sobre las tostadas y combinarlo con demás platos. Podríamos decir que mejora casi todas las recetas y encaja con casi todo lo que se nos pase por la cabeza, de hecho ya hemos visto la última tendencia de mezclarlo con el café, pero, ¿cuáles son sus verdaderos beneficios?
El aceite de oliva virgen extra es un tipo de aceite vegetal que presenta un alto porcentaje de ácido oleico así como también vitamina E y polifenoles, y es que los estudios científicos señalan que el AOVE contiene infinidad de efectos protectores sobre los factores de riesgo de enfermedades. Todo parecen ser ventajas, de ahí que muchos se hayan animado a su consumo a primer hora de la mañana, aún en ayunas, apostando por una cucharada de este alimento para empezar el día.
Esta rutina que ya forma parte de los desayunos de muchas nos ha dejado un tanto intrigadas. Nos recuerda en cierto modo a esa tendencia de depositar efectos milagros sobre productos cuyo consumo a primera hora de la mañana se tiende a aplaudir. Es el caso de una cucharada de vinagre de manzana en ayunas, o el típico vaso de agua con limón antes de desayunar.
Está claro que los beneficios del aceite de oliva virgen extra son irrebatibles, pero los cierto es que no existen estudios científicos que avalen que una cucharada de este ingrediente en ayunas pueda favorecer más nuestra salud que si tomamos la misma cucharada en cualquier otra franja horaria del día. Además no es necesario consumirlo en una cucharada podemos añadirlo a nuestras comidas en infinidad de formatos. Aún así, es importante señalar las propiedades de nuestro querido "oro líquido".
Propiedades del aceite de oliva virgen extra en nuestra dieta
- Nos ayuda a perder peso: según los estudios científicos llevados a cabo, una dieta en la que el aceite de oliva está presente favorece la pérdida de peso frente a otra que no apuesta por este ingrediente en sus comidas.
- Ayudaría a reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas: según las investigaciones llevadas a cabo por expertos, se ha advertido que el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular podría ser de la mitad en aquellas personas que consumen una cucharada y media de aceite de oliva virgen extra al día, frente a las que no.
- Disminuye la probabilidad de padecer diabetes: los estudios científicos ha explicado en más de una docena de ensayos aleatorizados, la capacidad que tendría el aceite de oliva virgen extra para ayudar a reducir la glucosa en sangre.
- Reduce el riesgo de sufrir cáncer de mama: las investigaciones científicas han anotado que el consumo diario de AOVE podría ayudar en la prevención primaria del cáncer de mama. Además, dichos resultados han sido apoyados por más investigaciones que insisten en que el consumo elevado de este aceite vegetal ayudaría a la protección frente al cáncer de mama.
Las propiedades del AOVE son sin duda todo un plus en nuestra dieta. Y es que podemos incluirlo en los desayunos, acompañando a nuestras rebanadas de pan o en otros muchos formatos, sin necesidad de recurrir a su consumo través de una cucharada de dicho ingrediente en ayunas, esperando efectos milagrosos.
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