La suya fue una de las caras más reconocibles de La que se avecina, que acaba de estrenar su temporada número 13 en Amazon Prime Video. Sin embargo, no veremos al personaje interpretado por Cristina Castaño formar parte de la nueva comunidad de vecinos. Judith Becker (descrita por Castaño como la "psicóloga moderna, joven e independiente en un vecindario muy pero que muy loco") abandonó en 2016 su apartamento en Montepinar y, desde entonces, vive sin pagar alquiler en el recuerdo de todos los fans de la serie española.
Cristina Castaño, nacida en 1978 en la provincia de Lugo, puede presumir de haber formado parte del cast de dos de las series más míticas de la televisión en España. Y es que, antes de unirse a La que se avecina, la conocimos en Al salir de clase. Corría el año 2000 y, aunque era un papel para el verano, se acabó quedando hasta el final de la serie en 2002.
Al salir de clase (Telecinco)
Antes de eso había hecho trabajos tan dispares entre si como apareceren la serie de Televisión de Galicia Pratos Combinados o trabajar junto a Concha Velasco en la obra teatral Las manzanas del viernes. Incluso en 2001 fue la representante de España en el Festival internaciona de la canción de Viña del Mar junto a Elvira Prado.
Y eso que Castaño se mudó a Madrid para estudiar periodismo, antes de dejar los estudios para centrarse de lleno en el mundo del espectáculo. Pasó por series El comisario o Hermanos y el musical Fama, con más de 600 representaciones por toda España, antes de fichar por La que se avecina.
Judith Becker
Siete años y 90 episodios pasó metida la actriz en el papel que la catapultó a la fama. Judith Becker fue un personaje principal de La que se avecina desde la tercera temporada hasta la novena. Una mujer moderna e independiente que soñaba con encontrar al amor de su vida mientras encadenaba relaciones fugaces y en las que el compromiso brillaba por su ausencia.
Aunque llegó a casarse con Enrique, con el que tuvo a su hijo Dylan, y del que se divorcia con un juicio de por medio por la custodia de este en el que el abogado de Enrique logró manchar la imagen de Judith, aunque finalmente la jueza decidió establecer la custodia compartida.
Telecinco
El último capítulo en el que pudimos ver a Judith fue en el 9x16, donde las cosas no acabaron bien para ella, que tenía previsto casarse con Gabi. Sin embargo, Trevor (el novio que tuvo en Chicago) reapareció para reconquistarla y prometiéndole haberlo dejado con su novia Megan.
No obstante, Judith era su plan B y cuando la psicóloga planta a su prometido para confesarlo su amor a Trevor, este le confiesa que sigue casado con Megan, quien acaba de abortar sus planes de irse al espacio para quedarse con él. Por eliminación se queda con Enrique Pastor y vende su piso en Montepinar a Yolanda Morcillo y Chechu Carrascosa.
Telecinco
La vida post Judith
Cristina Castaño abandonó la serie porque sentía que el personaje ya no le aportaba nada más. Fue una salida definitiva, ya que cierra la puerta a volver aunque sea por un único capítulo. Y puede que se cumpla ya que, desde entonces no ha parado de trabajar.
En 2015, ya había regresado al teatro como cabeza del cartel del musical Cabaret, en la versión de Jaime Azpilicueta, interpretando a Sally Bowles, el personaje que encarnó Liza Minnelli en la versión cinematográfica. Triunfando en el Tratro Rialto de Madrid y saliendo de gira por España hasta 2017. La producción ganó, además, 9 premios de 12 categorías en los Premios Teatro Musical. Entre ellos, mejor actriz revelación para Cristina.
Netflix
Después trabajaría en las series El final del camino y cuerpo de Élite. Y en las películas 13 exorcismos, La madriguera y Caribe Mix, entre otros proyectos. Sin embargo, la serie que la elevaría al plano internacional llegaría en 2019. En Toy Boy, junto a María Pedraza, encarnó a Macarena, una mujer poderosa y amante de Hugo Beltrán. Tras estrenarse en Antena 3, Netflix incluyó la ficción en su catálogo y la renovó por una segunda temporada.
Foto de portada | Telecinco
En Trendencias | Qué es un mandala: la actividad creativa que nos ayuda a conectar con nosotras mismas y reduce el estrés
