Existen casi tantas canciones de amor como de desamor. De hecho el segundo es tema recurrente en la música porque es algo que todos hemos vivido alguna vez en la vida. La bachata de Manuel Turizo, por ejemplo (que admito haber escuchado en bucle como método para superar una ruptura) es una canción de desamor. O Cupido de Tini, que se pregunta “qué nos pasó”.
De hecho si Tini se pusiera a pensar, quizá encontrara una o varias razones por las que pasamos de “nos queríamos tanto y ahora no”, como dice su canción. Y la respuesta la tiene la psicología, que nos explica los motivos por los que nos desenamoramos y la relación termina en ruptura.
Los motivos más comunes por los que nos desenamoramos
Antes de entrar en materia quiero aclarar algo para que no lleve a error. En esta lista no están todos los motivos por los que una pareja puede romper. En mi caso, por ejemplo, mi última ruptura fue fruto de una infidelidad por parte de mi pareja.
Hay otros casos en que las relaciones terminan por comportamientos tóxicos o hasta por falta de sexo, y aunque la psicología ahonda en algunos de los motivos que pueden haber llevado a la ruptura y al desamor (o viceversa) cada pareja es un mundo y los motivos por los que se acaba el amor, también.
Existen problemas de comunicación
Según afirma el Dr. Barton Goldsmith, terapeuta familiar y de pareja, la falta de comunicación es uno de los motivos que provocan el desamor. De hecho, hablar a diario con nuestra pareja sobre lo que pasa en la relación es más importante de lo que parece. No solo cuando hablamos de discusiones. Tal y como nos explica Iria Reguera, psicóloga y redactora jefe de Trendencias “en cualquier pareja va a haber cosas que no nos gusten, aspectos en los que no estemos de acuerdo y malentendidos”. Hablarlo es fundamental para evitar que nos distanciemos emocionalmente hablando.
La monotonía nos ahoga
Arturo Torres, psicólogo y sociólogo, explica que la monotonía es uno de los motivos de que se termine el amor. “Si aparece en el contexto de una relación romántica, la sensación de que nada va a mejorar y de que el aburrimiento forma parte del “contrato” que une a esas dos personas se hace muy patente”, llegando incluso a que la relación nos desencante. De hecho si escuchamos la canción Monotonía de Shakira, lo podemos ver claro.
Se dan cambios individuales y falta de compatibilidad
La ciencia ya nos ha dicho que con el amor no es suficiente para ser felices en pareja. Es posible que hace años los dos tuviéramos los mismos objetivos vitales y que a lo largo de los años no solo hayamos cambiado nosotros, también estos. Es como si se separan los caminos en pareja. De hecho, compartir valores y creencias es algo que tienen en común las parejas que más duran, y si eso cambia, el amor puede apagarse al no tener tantas cosas en común con la otra persona.
Los celos
La psicóloga María Esclapez desmonta el mito del amor romántico de “si siente celos es porque le importo”, en su libro Me quiero, te quiero, y de hecho los celos son un motivo de peso que puede provocar que el amor termine porque desgasta la relación en palabras de la experta.
Me quiero, te quiero: Una guía para desarrollar relaciones sanas (y mejorar las que ya tienes) (Bruguera Tendencias)
Aumentan las discusiones de pareja
Es un motivo de peso, sobre todo si esas discusiones, normales en cualquier relación, no se gestionan correctamente. La psicóloga Mamen Jiménez nos explica que es normal discutir en pareja, pero un exceso de estas puede provocar que el amor se deteriore hasta perderse.
Hay falta de respeto y confianza
Los expertos de en Psynthesis Psicología nos explican que el amor puede acabarse cuando “deja de haber respeto y confianza hacia el otro”. De hecho si queremos que cualquier relación perdure en el tiempo, es imprescindible que no se pierda el respeto, algo que conseguiremos si trabajamos de manera adecuada la responsabilidad afectiva.
Idealizamos a nuestra pareja y la relación
Si no existe aceptación de que la pareja tiene virtudes y limitaciones, y lo que hacemos es idealizarla, corremos el riesgo de deseamorarnos al darnos cuenta de que no es como pensábamos, tal y como explica Esclapez. Lo mismo ocurre con la idea que tenemos de nuestra relación, si no es realista y creemos que es algo que no es, al descubrir la verdad nos decepcionaremos. Los castillos en el aire no funcionan en las relaciones de pareja.
No cuidamos a nuestra pareja ni sus necesidades
Y no solo hablamos de las necesidades de nuestra pareja sino de las nuestras propias. Cuando dejamos de cuidar a la persona que tenemos al lado, y obviamos sus necesidades y las nuestras. Silvia Vidal, psicóloga forense, nos habla de que "escogerte a ti no es un acto de egoísmo. Es un acto de amor propio". Tenemos que cuidarnos para cuidar, y si se pierde eso, tenemos un problema.
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