¿Sabías que sentirte más joven puede ser muy beneficioso para la salud? Aunque hay estudios que han revelado que esta percepción de juventud podría ser una negación de la realidad, es decir, no estar aceptando quién eres, en cierto sentido, una edad subjetiva más joven puede ser un marcador psicosocial predictivo de un envejecimiento más saludable, según han explicado algunos expertos en referencia estudios llevados a cabo sobre ello.
Esta percepción positiva de la vejez significaría por tanto un mayor nivel de satisfacción consigo mismo además de reducir el riesgo de padecer otras enfermedades mentales como demencia y depresión. Otra reciente investigación llevada a cabo sobre este planteamiento estudió a 15.000 adultos alemanes durante 24 años y calcularon que un 11,5% de ellos se sentían más jóvenes que su edad cronológica. Dicho estudio comenzó en 1996 y durante 24 años se observó el comportamiento de estos individuos que tenían entre 40 y 85 años. El estudio concluyó que las personas que habían nacido más recientemente, se sentían más jóvenes. “Por ejemplo, una persona de 60 años nacida en 1936 se sentiría más como si tuviera 53 años, o solo un 12% más joven. Pero una persona de 60 años nacida en 1956, dos décadas después, se sentiría como si tuviera 50 años, o un 17% menos”, tal y como explican en este artículo.
Además, también se observó que el 59% de los participantes afirmaron que se veían más jóvenes que otras personas de su edad y parece que estas personas, según explican los investigadores, "informaron experiencias más positivas relacionadas con la edad, como que se les pidiera consejo y sabiduría y tener un fuerte sentido de propósito", en cambio, las personas que se sentían más mayores, "experimentaron interacciones más negativas".
A este fenómeno los investigadores lo llamaron “efecto de rejuvenecimiento subjetivo”, algo que se mantuvo hasta edades muy avanzadas lo que sorprendió mucho a los autores ya que normalmente, a más edad más vulnerabilidad se presenta. Pero, lo más curioso de este estudio es que se estableció que verse más joven es tan positivo, que además de los beneficios a los que apuntábamos antes, estas personas tienen un mayor bienestar, vidas más saludables y una menor tasa de mortalidad.
Pero, otra de las dudas que se planteaban los expertos del estudio era, ¿qué llevaba a estas personas a sentirse así? Pues parece que a medida que pasan los años, la calidad y esperanza de vida han ido en aumento, lo que puede ser un factor determinante para este cambio de mentalidad de sentirse más jóvenes que generaciones anteriores. Asimismo, otro factor importante a valorar es la discriminación por la edad, o edadismo, y su influencia en hacernos sentir más mayores de lo que somos.
Fotos | Vlada Karpovich cottonbro studio de Pexels
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