En mi 14 cumpleaños mis padres me dieron una copia de las llaves de casa, sin duda un momento mágico, pero a los 15 todo un mundo se abría ante mí cuando mis padres me regalaron por mi cumpleaños mi primer teléfono móvil.
Recuerdo que mi padre entró cuando dormía, lo dejó en la mesilla de noche y a las 9 de la mañana llamó al que sería MI número, algo exclusivamente mío. No te miento si te digo que aún sonrío al pensar en la ilusión que me hizo todo aquello.
Para mis sobrinas el móvil casi forma parte de su ser pero yo nací en una época en la que cuando se hablaba de móviles se hacía de ladrillos. Cuando llegué a la adolescencia el momento móvil estaba mejorando, ya no eran tan grandes y estaban empezando a ponerse de moda (mucho), así que tenerlo era un sueño.
Pero ¿cuáles eran los que se llevaban entonces? Ahora tenemos los iPhone, las grandes pantallas de los Samsung y los Mi, pero en los 2000 lo petaban los Motorola, los Alcatel y los Nokia. OMG, solo al decir las marcas ya me siento vieja.
Mi primer teléfono Chispas: Alcatel One Touch Easy
Madre mía la antenita que tenía el que fue mi primer móvil… Ahora su estética me parece terrible, pero estaba tan enamorada de él como de un primer amor. Era duro y resistente como pocos, algo que para una adolescente un poco torpe como yo era vital porque el móvil acababa en el suelo 2 de cada 10 veces que lo cogía.
Nokia 3310, el que nunca se rompía
Aunque si hay un móvil resistente en el mundo es el Nokia 3310. En el mundillo tecnológico era el equivalente a las cucarachas: si hubiera un holocauso nuclear, sobrevivirían. Y sí, nos regaló el snake, ese mítico juego al que podíamos pasarnos jugando horas como si al día siguiente no tuviéramos un examen de Lengua.
Y no hablaremos de las carcasas que podía intercambiarse (maravilla para ir a juego con el outfit) o de que fue de los primeros que te permitían poner politonos como por ejemplo, la música de Expediente X o la canción más famosa de la peli de El exorcista. Mítico.
El Ericsson T10 y su tapa
Parecía salido de una película californiana de la época. La tapa podía quitarse y tenía una antena pequeña. Y los colores, ay, los colores. Mira qué fantasía de turquesa.
El móvil de Matrix, el Nokia 7110
Hola Neo. ¿Sabes quién soy? Keanu Reeves respondía a la llamada del señor Anderson con un Nokia y nosotros nos quedábamos flipando. Cuando salió la película en 1999 lanzaron este Nokia 7110 inspirado en Matrix (en la peli en realidad se usa un Nokia 8110 modificado, dato friki del día).
Recuerdo que mi hermano lo tenía y deslizaba la tapa del teclado cada vez que se mensajeaba con su novia, y a mí me parecía todo muy top. Y el color era un guiño a la que acabaría siendo una de las sagas de ciencia ficción más importantes de la historia. A día de hoy es una auténtica reliquia buscada por los muy fans.
El estilo siempre fue para el Motorola V3
Eran los 2000 y se llevaba el flequillo al lado y el lápiz de ojos negro a fuego. París Hilton lo tenía en rosa y yo en gris y siempre fue mi favorito en la adolescencia. Se inspiró en el que usaba Spock en Star Trek, un móvil muy fino y plegable: así nacía el mítico Motorola Razr.
Recuerdo abrirlo para contestar el teléfono y sentirme como una ejecutiva de una empresa mega importante a punto decir “no puedo perder otro millón de dólares con este tema, Richard. Haz bien tu trabajo o estarás despedido”. Me hacía sentirme poderosa a rabiar y a día de hoy volvería a él si no estuviese tan enganchada a TikTok.
Toda la música con el Sony Ericsson W580
¿Por qué llevar un walkman y un móvil si puedes llevar todo en uno? El Sony Ericsson W580 era justo eso, un móvil con la capacidad de almacenar y reproducir música. Este móvil podías oír a Britney Spears a todo meter y al deslizarlo, llamar a tu madre para decirle te retrasabas 15 minutos de la hora de llegada a casa.
El Nokia 8210, el más pequeño
Llegó un momento en que el tamaño nos obsesionaba y las marcas buscaban móviles cada vez más pequeños. Este le vimos en Los ángeles de Charlie y nos flipó. Pequeño y práctico, entraba hasta en nuestros bolsos más mini.
BlackBerry Curve 8520, la fav de los jefazos
La primera BlackBerry, la 6210, buscaba facilitar el trabajo a la hora de escribir. Sobre todo cuando los ejecutivos descubrieron que llevaba integrado el servicio Blackberry Enterprise Server con el que podían tener el correo en el móvil. Nosotros no lo usábamos para eso, sino para escribir aún más deprisa nuestros sms acortados. Ls letrs costabn mux nls 2000.
La que más se vendió en España fue la Curve 8520. Fueras a la discoteca que fueras había una de estas en un radio de 10 metros alrededor de tu grupo de amigas. Y es posible que hasta tú tuvieras una.
El primer móvil con cámara que lo petó: Nokia 7650
Aunque el primer móvil con cámara fue en el J-SH04 de Sharp Corporation, no fue hasta la llegada de este Nokia que las compañías se dieron cuenta del filón de poner cámaras en el móvil. ¿Imaginas tu vida sin poder hacerte un selfie solo sacando el móvil? Pues la culpa fue del Nokia 7650.
Nokia N97, para los mensajes más largos
Te invito a que pienses en la velocidad con la que escribías los sms teniendo todo el abecedario y los símbolos en 12 botones (sí, Whatsapp hace muy poquito que está con nosotros y antes nos comunicábamos por mesajito). Si lo hicieras ahora sería eterno, pero en aquella época nuestros dedos volaban por el teclado.
El Nokia N97 llegaba para facilitarnos el trabajo porque con un movimiento de deslizamiento, voilá, aparecía un teclado QWERTY para escribir hasta la redacción de las sufragistas de la clase de Historia si hacía falta.
Fotos | Markus Spiske on Unsplash, Xataka, Arma Letal, Matrix, Motorola, Nokia, BlackBerry
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