Okuda San Miguel se ha convertido en unos de los artistas españoles más admirados en el mundo. Considerado "el Bansky español" es conocido por sus trabajos de arte urbano y se ha convertido en un icono de la modernidad cántabra. Pintor, escultor y diseñador cántabro, realiza obras de gran formato y aire transgresor que están formadas por figuras fragmentadas en formas geométricas y fuerte policromía llenas de positivismo.
Ha dejado huella en lugares como París, reinterpretando La Mona Lisa de Leonardo da Vinci en un mural a 60 metros de altura, Boston, con su exposición al aire libre, ayudando en la reforma de la UCI pediátrica del hospital Clínico San Carlos con apoyo de la Fundación Aladina, o en la transformación de una iglesia abandonada en Asturias que se convirtió en un lugar para el ocio y el skate.
Su último trabajo es una intervención en la Casa San Miguel Ibiza, una experiencia multicultural, en la que se podrán vivir diferentes actividades los meses de junio y julio. Durante el verano, Casa San Miguel Ibiza se convierte en un auténtico referente a la hora de redescubrir la gastronomía, la música y el arte más inquietos e innovadores.
¿A qué se debe su éxito? ¿Ha conseguido el artista demostrar que el grafitti puede llevar al éxito? Conocemos un poco más a Óscar San Miguel Erice y charlamos con él sobre arte urbano, su obra y su inspiración.
Cuéntanos cómo será tu intervención en la Casa San Miguel Ibiza, ¿en qué te has inspirado?
Simplemente he recogido varios de mis iconos, por ejemplo, mis paisajes surrealistas y una de mis musas. Me he inspirado en el propio hecho de beber, porque beber es necesario para vivir, y la idea es hacer una metáfora de que mi musa bebe del mundo. Se retroalimenta de todas las culturas, de todos los países.
¿Cuál es la obra de la que te sientes más orgulloso?
Quizás la iglesia de Llanera (Asturias), porque ha sido mi primera obra, o la única que he hecho por mí mismo. Descubrí el lugar por Internet, me enamoré de él y puse todo lo que estaba en mi mano, con ayuda de varias marcas y de un crowdfunding. Sin embargo, para el resto de proyectos, me han llamado y está todo cerrado. Además, en la Iglesia se sumaban varios temas mediáticos… Skate, religión y arte contemporáneo.
¿Qué has mantenido en tu trabajo del inicio y qué has cambiado?
He mantenido la idea o la relación que tengo con el surrealismo, que adquirí en mi época académica. Creo que incluso cuando empecé pintando letras, las letras ya eran una dualidad; eran letras y a la vez eran calaveras, caras o cosas así. Creo que el surrealismo ha estado siempre presente en mi obra.
¿Cómo eliges los soportes?
Muchos no los elijo yo, sino los gestores culturales, promotores o agencias con las que trabajo, me encanta variar de soporte, de país, de técnica… variar, no hacer siempre lo mismo. De repente estar un mes en el estudio, a la semana siguiente hacer un mural de 25 pisos, la siguiente una escultura en Boston … Me encanta variar, sino me aburro.
Tienes más de 200 mil seguidores en Instagram, ¿cómo influyen las redes sociales en tu trabajo?
Creo que las redes sociales me han dado más libertad, en todos los sentidos, lo que han hecho que me lluevan proyectos de todos los lugares, me han dado reconocimiento en lugares en los que nunca hubiera imaginado, por ejemplo, con la Iglesia de Llanera hice entrevistas para países que ni siquiera tienen Street Art, como por ejemplo Tailandia (que igual ahora sí tienen). Las redes sociales te permiten no depender de nadie, te puedes mostrar al mundo tal y como tú quieras mostrarte y tienes la sartén por el mango dentro del mundo del arte. Tú eres el dueño de ti mismo y nadie más lo es.
¿Es necesario estar en Instagram para convertirte en una marca que vende?
Instagram es una herramienta esencial para cualquier artista, marca o empresa.
Gracias a tu éxito puedes elegir en qué proyectos colaborar y en cuáles no, ¿qué tipo de proyectos son los que más te motivan?
Me motiva hacer cosas en países a los que todavía no he ido y que sea algo más grande de lo que ya he hecho hasta el momento. En envergadura y en presupuesto, porque me permite hacer cosas que igual no hago como, por ejemplo, llevar la escultura hasta un término arquitectónico que pueda ser habitable. Así puedo seguir avanzando y creciendo. Eso es lo que más me motiva.
Ahora mismo llevas un ritmo de trabajo imparable, viajas por todo el mundo… ¿qué te gusta hacer para relajarte?
Me gusta ir a ver a mi madre, que a la pobre la tengo abandonada porque viajo muchísimo. Lo que me gusta hacer para relajarme es no hacer nada, la gente en las vacaciones viaja y yo no, yo lo que hago es no viajar, me gusta ir donde mi madre, a la playa … En general, cuando estoy viajando, me gusta dejarme días libres entre medias para conocer playas nuevas, lugares nuevos maravillosos, salir de fiesta con mis amigos, porque tengo muchos amigos DJs. Cada vez que estoy en Madrid o en lugares en los que conozco gente, como Nueva York, lo que me gusta hacer es salir, porque creo que eso también es muy importante para la creatividad y para mantenerte vivo.
¿Qué proyectos tienes en mente en el futuro?
Tengo todo el año lleno de proyectos, pero son tantos que ahora mismo no podría decírtelos. Me voy el viernes a Las Vegas a hacer un mural bastante grande que se completa con dos especies de carteles típicos americanos de publicidad, es decir, pintamos el mural más los dos carteles.
En Francia hago un edificio y después vuelvo a Madrid, que me apetece mucho, para preparar mi expo obra Filipinas, luego me marcho a Rusia y otra vez a Las Vegas a hacer otro proyecto, también haré una escultura grande para Seattle y otra para India… y cosas muy chulas también para el año que viene.
Además, tengo una colaboración que me hace especial ilusión, porque mis dos pasiones son el arte y la música, y en este proyecto se unirían, dando vida a mis creaciones en 3D y, además, pudiendo la gente interactuar con ellas … Va a ser maravilloso y tendrá lugar entorno a una pista de baile.
¿Te gustaría adentrarte en una disciplina artística que no hayas probado aun?
En todas con las que tenga algo que ver y que me aporten algo … no sabría decirte ninguna en este momento … quizá música, cocina … de todo saco caminos nuevos.
Agradecemos a Okuda su participación en la entrevista y a San Miguel la posibilidad de facilitarnos conocer a este artista que está dando tanto de qué hablar. Estaremos muy atentos a los próximos proyectos de Okuda San Miguel.
Fotos | San Miguel, La maleta de Carla
