Esta es una de mis fragancias favoritas y que nunca me falta sobre todo cuando llega el verano. Lleva ya más de 15 años en el mercado, siendo el primer intento que hizo Bulgari en el mercado del perfume, en el que después se ha movido como pez en el agua. Lleva notas de azahar, pimienta, rosa, jazmín, té verde y bergamota entre otros y se trata de un perfume de primavera/verano, muy fresco pero con un toque floral, sin llegar a la ligereza de un cítrico.
En realidad Eau au Thé Vert (del que se dice es también uno de los favoritos de Letizia Ortiz) se lanzó al mercado como una fragancia unisex, aunque arrasa entre el género femenino más que en el masculino, quizá por la forma suave de su frasco. Elegante y discreto, deja una estela limpia y sencilla, pero a la vez tiene un toque bastante energizante cuando te lo pones por la mañana, sin llegar a la dulzonería de otras fragancias de té verde que hay en el mercado (como por ejemplo la de Elizabeth Arden).
Existen dos formatos, el Eau ligera y el Eau Parfumée, que es la que yo uso. La primera es más suave y más fresca y la segunda es un poco más fuerte, no mucho, y dura muchísimo más. Además si la probáis veréis que es difícil cansarse de ella, como ocurre con algunas fragancias de verano que empalagan y acabas deseando que se acaben.
