Nueva tendencia viral a la vista, esta vez entre dos realidades, una más normal que la otra: maquillaje de Instagram vs. el de todos los días. Es decir, nos vienen a mostrar en un lado de la cara ese maquillaje más potente que solo usaríamos en ocasiones muy marcadas, frente a ese maquillaje más para el día a día en el otro lado de la cara. Como os digo, una tendencia viral que se extiende como la pólvora.
Hace unos días os tría una recopilación de algunos tutoriales de "maquillaje para todos los días" que podían ser calificados de cualquier otra forma excepto de eso. Se trataba de maquillajes muy pesados, con muchos productos, muy elaborados... vamos, algo muy lejos de lo que "las humildes mortales" podemos permitirnos en nuestro día a día para ir a trabajar, hacer la compra, llevar a los nenes al cole y demás quehaceres.
Pues más o menos, esta nueva moda viral va en esa línea, de comparar los maquillajes que muestran las algunas chicas a través de Instagram, grandes obras (casi de ingeniería) que te dejan con la boca abierta, frente a lo que la realidad manda o al menos el sentido común.
Y es que el tema de las pestañas postizas en el día día no es que no lo vea, es que me parece totalmente inviable, así como esas sombras tan dramáticas o el contouring hasta en el alma.
Desde que veo escrita las palabras "maquillaje de Instagram" ya sé lo que significa: capas y capas de base, polvos fijadores, translúcidos, iluminadores, paletas de 100 colores, pincel, brocha, pincel,... y un resultado totalmente profesional.
Sin embargo, la campaña, en el fondo, trata de comparar ambos maquillajes y ver la belleza de ambos, precisamente por el poder del maquillaje. También apelan a poder usar el que queramos, porque al final del día ambos se van de la misma manera. En este punto no estoy de acuerdo, por supuesto que cada uno puede usar lo que quiera, solo faltaba, sin embargo, no creo que sea necesario ir a la oficina como que salieses de un escenario de Brodway, a lo que hay que sumar que la piel también lo sufre y todo el tiempo que es necesario invertir.
Pero en el fondo es una decisión personal de cualquiera de nosotras, lucir uno u otro. Son dos formas diferentes de sentirnos guapas, eso sin duda.
Lo que está claro es que el hecho de maquillar ambos lados de la cara con dos tendencias diferentes se ha ido extendiendo cosa mala y no falta nadie en unirse, demostrando una vez más ese poder del maquillaje del que halábamos.
Si me preguntáis a mí, prefiero el maquillaje del día a día, pero sencillo, que conste, y reservar para ocasiones muy puntuales y especiales esos otros maquillajes más elaborados y pesados.
¿Qué os parece a vosotras esta nueva tendencia? ¿con cuál os quedáis?
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