A ver, a mí también me impondría recibir ciertas llamadas de mi padre si este fuera Clint Eastwood por muy tierno y sensible que este se mostrase en Los Puentes de Madison, así que entiendo a la perfección la actitud de una de sus hija, la exactriz Alison Eastwood, cuando recibió una llamada del actor y director para ofrecerle un papel en su película La Mula después de que esta se hubiese retirado incluso de la actuación.
A pesar de que quizás el hijo más conocido del artista sea Scott Eastwood, protagonista del maravilloso videoclip de Taylor Swift Wildest Dreams, la prole de este rostro tan hollywoodiense es grande. De hecho, ha estado casado dos veces y tiene ocho hijos con seis mujeres distintas. Agotador se mire por donde se mire.
Una de sus hijas es Alison Eastwood, que tiene 51 años y que estudió interpretación en la Universidad de California, en Santa Bárbara. No obstante, mucho antes de formarse como tal siendo niña ya había probado con algunos papeles, al igual que le pasó al hijo de Robert De Niro, que finalmente ha triunfado en un negocio que poco tiene que ver con la profesión de su padre.
Sin embargo, la hija del intérprete no llegó a finalizar sus estudios, según la revista People. En cualquier caso, parece ser que no necesitó de ese empujón extra para que la cosa fluyese mientras estuvo en activo. Por supuesto, su primera gran oportunidad vino de la mano de su padre en el título Medianoche en el jardín del bien y del mal, un largometraje donde comparte protagonismo con John Cusack.
Tras eso estrenó diferentes películas e incluso llegó a probar suerte como directora al cargo de Rails and Tails, una cinta en la que apostó por los actores Kevin Bacon y Marcia Gay Harden.
A pesar de ello, cuando Alison cumplió 40 años decidió poner punto y final a su carrera delante y detrás de las cámaras. Imagínate la fantasía de jubilarte con esa edad... ¡Las ventajas de ser nepo baby! Desde entonces, Eastwood se ha centrado en su labor altruista y solidaria en el refugio para animales que ella misma fundó, pero una llamada de parte su padre perturbó su tranquilidad.
En concreto, cuando cogió el teléfono al otro lado se encontraba el productor Sam Moore, encargado de esta labor en la película La Mula, del padre de Alison. ¿Qué sucedió en esa conversación? Pues que Moore la llamaba para informarla de que su padre quería que interpretase el papel de su hija en el film, lo que provocó que le diera un vuelco el corazón tal que casi la llevó a vomitar.
A pesar de las dudas iniciales, fue su marido el que la convenció para que ese nerviosismo inicial se tradujese finalmente en un "sí", ya que como People recoge, era una bonita forma de volver a conectar con su padre a nivel profesional y sabía que se terminaría arrepintiendo en caso de hacer lo contrario.
Fotos | @alison.e-wood y Gtres
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