Las plantas huevo que arrasan en Japón llegan a España para decorar casas pequeñas y minimalistas

Llenar la casa con plantas, sobre todo cuando vivimos en entornos urbanos, es vida. No solo decoran cualquier rincón sino que le dan un toque natural a cualquier estancia. Además, nos ayudan a relajarnos y hacen que la atmósfera de nuestro hogar sea mucho más agrdable. Como buen ejemplo tenemos la planta más vendida de Ikea. Sin embargo, también hay formas de tener plantas en casa que se salen de la norma y que consiguen llamar la atención de las visitas. Este es el caso de los Eggling, unas macetas de cerámica que tienen forma de huevo que están arrasando en Japón.

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Los Egglings son unas macetas originarias y hechas a mano en Japón que tienen tanto la forma como el tamaño de un huevo. Sin embargo, con el contenido de su interior no podemos hacer una tortilla...

En el interior de esta pequeña maceta de diseño minimalista lo que hay es turba (un preparado orgánico compuesto por residuos vegetales y nutrientes que sustituye a la tierra), y distintas especies que pueden crecer en ese pequeño espacio. Desde cactus a lavanda de la Provenza (11,45 euros), incluso pequeñas fresas (16,31 euros).

Para que la planta pueda florecer, primero tenemos que romper la parte superior del huevo valíendonos de una cuchara, tal y como si se tratara de un huevo pasado por agua. Una vez que hayas roto la parte superior de la maceta, deberás regarla y esperar con paciencia a que la planta vaya creciendo.

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Solo necesita de tus cuidados para crecer fuerte y hermosa. Cuando hayan transcurrido cinco meses, eso sí, deberás trasplantarla a otra maceta más grande para que pueda seguir desarrollándose.

Mientras tanto, los huevos llegan también con un pequeño plato incluido sobre el que poner el huevo. Una forma de ver nacer y crecer una planta que, además, no está reñida con las estética, decorando cualquier espacio incluso antes de haber germinado.