Cuando vivimos en un espacio reducido, cada elemento tiene que estar pensado al milímetro. Desde un tendedero que se acopla en la bañera hasta los zapateros que aprovechan el espacio detrás de la puerta. No obstante, un piso compacto (por así decirlo) no tiene por qué ser sinónimo de piso aburrido. De eso podemos dejar que se encarguen las plantas. Incluso si apenas te entra luz del sol, estas opciones son muy agradecidas y crecen hasta en la penumbra.
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La cinta o Chlorophytum Comosum
Esta planta es, prácticamente, inmortal. Aunque puede estar en exterior, la luz directa termina quemándola. Sin embargo, si la ponemos en una maceta dentro de casa, crecerá en cualquier rincón por oscuro que sea. Es superduradera y no requiere de muchos cuidados, así que tampoco pasa nada si te olvidas de regarla de vez en cuando. Además, es muy sencillo sacar esquejes y reproducirla para tener más plantas y decorar otros espacios que lo necesiten. Puede que tu piso sea oscuro, pero con la cinta no le faltará vida.
La cola de ratón o Peperomia
Esta planta es totalmente camaleónica y capaz de adaptarse a casi cualquier entorno o espacio. Por eso, si la colocas en zonas oscuras encontrará la manera de proliferar sin perder su característico color verde y sus hojas redonditas.
Begonias
No obstante, no se trata de llenar la casa únicamente de plantas verdes. Aunque, probablemente, ya habías abandonado la idea de tener flores en casa debido a la falta de luz solar, las begonias vienen al rescate. Son capaces de florecer en entornos oscuros y dar a tu decoración un toque más intenso de color. Además, su floración es muy densa y en racimos así que, cuando se llena de flores, es impresionante.
Palmera de salón o Chamaedorea Elegans
Aunque fuera llueve y truene, tu salón puede ser absolutamente selvático con esta palmera de interior. No necesita casi nada de luz y aguanta incluso en los rincones más oscuros. Es muy resistente si la riegas a menudo y tiene un plus más: elimina los olores de tabaco y otros humos.
Poto o Epipremnum aureum
Si es un icono de la decoración vegetal en casa es, entre otros motivos, porque es casi imposible matarlo. Puede crecer en tierra o sumergida en agua y es una planta colgante o una planta trepadora. Puede vivir hasta en los interiores más oscuros y da tantísimos esquejes que podríamos montar un negocio de potos. Es, para mi gusto, la mejor de todas si tu casa no tiene nada de luz.
Foto de portada | feey
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