Existen recetas tan fáciles de hacer que lo complicado es hacerlo mal. Un ejemplo claro lo tenemos con esta propuesta de hoy: siguiendo unos pasos sencillos, lograremos un postre delicioso que lo puede hacer cualquiera en casa (y en poco más de 30 minutos). Hablamos de la receta de bizcocho de yogur, un clásico básico para iniciarse en mundo de la repostería.
Con la medida de un envase de yogur como medidor principal, nada puede salir mal. Además, recordar las proporciones es muy sencillo porque aceite, azúcar y harina, -ordenadas alfabéticamente- llevan la proporción de 1, 2 y 3, es decir, una medida de aceite, dos de azúcar y tres de harina. Con esos sencillos ingredientes tendremos todo lo necesario para hacer el bizcocho más delicioso que siempre sale bien.
Cuando hablamos de facilidad, nos referimos a que esta receta la puede hacer cualquiera (sin importar la edad). Lo más importante son las medidas de "1, 2, y 3" aplicándolas a los ingredientes ordenados alfabéticamente. Por ello pondremos en un bol el contenido de un vasito de yogur junto a los tres huevos, una medida de aceite de girasol y dos medidas de azúcar. Una vez tenemos la mezcla, batimos bien.
En otro lado vamos a mezclar la harina (un total de 3 medidas del vasito de yogur) junto a la levadura y removeremos para que se distribuya la mezcla de manera homogénea. Gracias a unas varillas, incorporaremos poco a poco la harina sobre el bol con el resto de ingredientes. De este modo, se irá creando una masa mientras batimos y añadimos más harina -según se va incorporando-. Si queremos que el bizcocho tenga toques cítricos, es el momento de añadir la ralladura de un limón.
Previamente, precalentaremos el horno a 180ºC durante unos diez minutos y untaremos con mantequilla el molde para el bizcocho. Una vez este paso esté listo, volcaremos la masa en nuestro molde y dejaremos que se hornee sin abrir la puerta del horno durante (aproximadamente) unos 35 minutos. Es importante no abrir el horno antes para evitar que baje la temperatura en el interior del horno y no caiga el bizcocho.
Pasados unos 30 minutos, abriremos rápidamente para verificar el punto de cocción (metiendo una brocheta de madera en la masa para comprobar si sale limpia o sucia). Si sale limpia, el bizcocho estará listo; si por el contrario sale sucia, esperaremos otros cinco minutos y después apagaremos el horno.
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Con qué acompañar el bizcocho de yogur fácil
La receta de este bizcocho de yogur es riquísima sin necesidad de acompañarlo de nada más, sin embargo, siempre podemos elevar el resultado para emular un postre de esos que se compran en una pastelería. Por ello, lo podemos acompañar de una buena mermelada o rellenarlo de crema pastelera (o nata montada si se prefiere). Además, también va muy bien acompañarlo de un vaso de leche fría, un café con leche o un té helado.
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Fotos | Caramelle Gastronomia, Directo al Paladar
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