Si te gusta el puré de patatas o las patatas fritas, vas a amar esta receta de la abuela de Liliana Fuchs, experta de Directo al paladar. Se trata de un plato tan simple que casi ni parece una receta. Su elaboración no tiene mucho misterio y eso nos encanta sobre todo porque, al mismo tiempo, es delicioso. Se trata de las patatas chafadas con limón.
Los únicos ingredientes que necesitamos para disfrutar de este manjar sencillo son: patatas cocidas, aceite de oliva virgen extra (preferiblemente) y limón en una cantidad generosa. Además de esto, el plato se remata con su punto de sal y, opcionalmente, pimienta negra. Lo mejor es que, probablemente, ya los tengamos todos en la despensa.
No obstante, la clave está en una textura entre cremosa y tradicional de puré que adquiere la patata cocida con la mezcla de aceite y limón. Normalmente este plato se cocina a ojo, calculando una patata mediana por persona y luego echando los demás ingredientes sobre la marcha, probando y ajustando.
Este es el mejor método porque el punto depende del gusto. Así que no hay que tener miedo en echarle limón a chorro, pero poco a poco. Ten en cuenta que este cítrico es el encargado de aportarle gran parte de la gracia al plato.
Además, es un plato al que el reposo le sienta bien. Incluso se crea almidón resistente que aumenta su capacidad de saciedad. No obstante, es posible que haya que corregir la textura aliñando de nuevo por si espesara demasiado. Lo ideal es servirla como una guarnición o entrante, pero también se prestan para cenar sin nada más si te gustan mucho.
Fotos | Directo al paladar
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