Esta planta es un aloe vera. En nuestras colinas y montañas hay un montón, según la zona de España donde estés. Ya sabemos todos lo reparador y cicatrizante que es el gel de aloe vera para la piel y voy a mostraros cómo hay que sacarlo de la hoja.
Los que nos lean desde Canarias lo tienen clarísimo: desde las islas exportan un montón de aloe vera, una de las plantas más fáciles de encontrar junto con los plataneros. Aquí le llamamos vulgarmente un cáctus porque es de la familia de las plantas grasas, de las que soportan muy bien el frío y no necesitan casi riego de agua (la humedad las mata).
Si quieres tener una planta de aloe vera en casa, nada más fácil que mantener en el balcón. El jugo del aloe vera se obtiene en bruto simplemente cortando la hoja, tanto transversal como longitudinalmente.
Yo lo he hecho con un cutter pero las hojas se parten simplemente doblándolas con la mano. Si quieres aprovechar bien ese gel-jugo de la planta, ves cortando rodajas pequeñas a medida que las necesites. Puedes conservar las hojas que se caigan o que cojas de ella en la nevera.
Ahí puedes ver qué fácil es obtener aloe vera puro. Aplica ese gel acuoso directamente sobre la piel: verás que es ultra-ligero, fresco e incoloro. No quieras sacarlo de la hoja y meterlo en un tarro: mucho mejor si lo vas utilizando fresco al momento.
Por sus propiedades cicatrizantes, regeneradoras, antiinflamatorias e hidratantes es el producto ideal para después del afeitado. Esos inevitables pequeños cortes de la cuchilla, las marcas de los granos (¡no los toques más, hombre!), quemaduras solares o de cualquier otro tipo, etc.
Una vez me quemé la espalda con el sol. Mejor dicho, me la chamusqué. Suerte que en la tienda vendían aloe vera en gel, 100% aloe vera: evitó que me cayera la piel a tiras, su frescor calmante me dejó dormir bastante bien por la noche y me mantuvo el moreno.
Esa hoja que he cortado para mostraros la foto me la dió un amigo que utiliza aloe vera después del afeitado porque es un desastre en cuidados cosméticos y tiene la piel irritada contínuamente. Se aplica el aloe vera como after-shave y le va de maravilla: le calma muchísimo. Recordad que es hidratante pero ni reafirmante ni antiarrugas: no sustituye vuestro tratamiento facial.
En Mensencia | Aloe Vera, tu aliado cosmético
