Hermès ha querido poner de manifiesto todo el arte del lacado, reinterpretando el diseño del Arceau Cheval d'Orient - un dibujo que, hasta la fecha, sólo se podía ver en uno de los servicios de mesa más emblemáticos de la Maison. Y lo ha reproducido declinándolo en tres composiciones absolutamente excepcionales, realizadas sobre tres pequeñas esferas, para tres relojes de pulsera.
Para dar vida a estas escenas ecuestres, de clara inspiración oriental, ha hecho falta poner a prueba toda la paciencia, la minuciosidad y el savoir-faire del lacador, para que pudiese salir victorioso del desafío que suponía realizar este complicado diseño en miniatura.
Con el extremo de su pincel, el artesano ha ido depsositando las diferentes capas de laca. Entre cada una de ellas, ha tenido que dejar pasar tres días, para que se secasen bien, antes de proceder con la siguiente capa. Al tener que trabajar por etapas, el lacador tuvo que repetir esta alternancia de gestos durante semanas, hasta superponer un total de treinta capas para obtener una base de fondo negra.
A continuación, realizó el croquis de su diseño con lápiz sobre la esfera pefectamente lacada, y preparó su paleta de colores para obtener los tonos deseados. Con la ayuda de su pincel, fue dando vida a este sofisticado dibujo aplicándo los colores a través de sucesivas capas.
Finalmente, tuvo que pulirlo todo con cuidado para desvelar la extremada delicadeza de un dibujo de vivos colores en 3D, que sólo el trabajo en laca es capaz de proporcionar.
Cada una de las esfera fue luego ensamblada dentro del modelo Arceau fabricado en oro gris. Los caballos cubiertos por vistosas mantas de estilo persa se convierten así en cómplices del amor que Hermès siente por todo lo que tenga que ver con el artesanado y con lo ecuestre.
Más información | Hermès
En Embelezzia | En su última campaña, la top Othilia Simon se metamorfosea con el paisaje y los caballos para Hermès
