Lady Di se convirtió en pocos minutos en una de las personas con más poder de prescripción en Reino Unido, pero también en medio mundo. Pasó de ser una profesora de guardaría a ser la consorte del Heredero al Trono, el Príncipe Carlos de Inglaterra. Mientras ella misma reconoció que tan sólo tenía unas cuantas prendas en su armario, desde el momento del anuncio de su compromiso, éstas se multiplicaron en cuestión de días. Pero aunque ahora la recordemos todos como un auténtico icono de estilo, lo cierto es que ella no encantó desde el principio.
La primera cita oficial, con su entonces prometido, fue en 1981 durante un baile benéfico en el Goldsmiths' Hall. Era el primer acto en el que pasó a ser una auténtica diva de Hollywood. Para este importante evento acudió a la redacción de una de las revistas de moda más conocidas del mundo, donde le aconsejaron a los diseñadores David y Elizabeth Emmanuel, que se convirtieron en el Felipe Varela de nuestra Reina Letizia Ortiz.
Ellos le confeccionaron un maravilloso vestido de tafetán de color negro, con escote corazón y mucho volumen, un diseño que hoy en día vuelve a estar de moda y sino que se lo digan a Valentino, que ha usado este tejido hasta la saciedad en sus últimos desfiles.
Pero a pesar de lo maravilloso que resulta con el tiempo, este primer vestido no hizo gracia a la Casa Real, ni al Príncipe Carlos ni, mucho menos, a la crítica prensa del momento. Demasiado escote, un tejido muy arrugado y un diseño sofisticado que una chica de 19 años quizás no tendría que haber elegido, estos fueron los comentarios que se hicieron en su momento y que pueden dejar muy tranquilas a Kate Middleton y Meghan Markle porque la perfección no se puede encontrar en todos los momentos. Ellas, hoy podrían brillar con este vestido.
Desgraciadamente este diseño no está en el Palacio de Buckingham, porque a Diana Spencer le gustó tanto que cuando bajó de peso lo llevó de nuevo a los Emanuel para hacer unos ajustes. Estos le confeccionaron otro diseño a medida y se quedaron con este vestido en su taller, años más tarde ellos lo decidieron subastar debido a sus problemas económicos, los años de bonanza como diseñadores de cabecera de Diana de Gales desaparecieron.
Fotos | Gtres
