Pues sí, por increíble que parezca Lindsay Lohan se ha dejado ver por Madrid. Y es que la firma de bisutería Uno de 50 la ha elegido como embajadora a nivel mundial y ella ha querido venir a celebrar el 20 aniversario de la marca. Muy corporativa pero también muy poco acertada con un look muy veraniego, no era para menos con el calor que hizo ayer en la capital. ¿Es Lindsay el perfil perfecto para atraer ventas de moda?
Para la ocasión Lindsay eligió un vestido de color rojo con tres elásticos muy poco favorecedores. Uno de ellos en el pecho y otro muy cercano en la cintura, creándole un efecto abullonado que no había por donde cogerlo. El tercer elástico se encontraba a media pierna por lo que la sensación de saco volvía a crearse con facilidad. Los zapatos anudados en el tobillo tampoco le estilizaban y los complementos de la firma tampoco llamaron mucho la atención. Esperemos que Lindsay se comience a preocupar por sus estilismos tanto como por su rostro.
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