Si para su colección crucero del pasado lunes, Dior presentaba un repertorio colorista y de inspiración folk, Karl Lagerfeld para Fendi hacía prácticamente todo lo contrario, y sin ni siquiera necesidad de pasarela ni público, creaba una puesta en escena sobria, delicada y muy austera.
Todo muy acorde con sus propuestas, de líneas absolutamente sencillas, con predominio de los tonos nude, vamos, sin estridencias ni ostentación alguna, haciendo todo un ejercicio de sofisticación.
A pesar de que sólo se presentaban 24 modelos, la mítica casa italiana de la baguette duplicaba así sus colecciones intermedias anteriores, se nota que estas tiene tirón, y los modistos se han dado cuenta de que no basta con las colecciones ordinarias, hay mucha hambre de moda y aún más, necesidad de tendencias.
Mucho blanco, mucho azul, y algo de color maquillaje y negro son las apuestas del káiser para la firma; pantalones de pata ancha, vestidos de punto de seda, jeans, shorts y plataformas, son las claves de esta colección de inspiración marinera perfecta para aquellas clientas adictas a la navegación que quieran lucir estupendas pero cómodas en sus yates.
Las que no tenemos barco, ni tampoco lo queremos, también podemos lucir los escuetos modelitos en las playas y piscinas de nuestras respectivas localidades.
Vía | style.com