Con Saint Laurent y Givenchy convertidos en dos de los referentes de la industria ávida de clones la siguiente Primavera-Verano 2014 Riccardo Tisci decide poner una distancia clara entre los mercados. Esta vez no habrá casi ningún estampado que le puedan copiar, las formas y el estilo es lo más alejado que imaginamos de la calle mientras que él se lleva a la marca francesa a tres enclaves distintos. Al instante es fácil recordar cualquier imagen vista de África, Japón e India.
Riccardo Tisci pone tierra de por medio con sus recientes colaboraciones y en esas también le crecen los enanos. Puede que el clon esté dentro de casa, como se hacen eco desde ABC, en la falda que está claro vamos a ver en la próxima primavera hasta rabiar. Esta foto la subió el diseñador brasileño a su Instagram al poco de terminar el desfile de Givenchy. Tufi Duek (que había desfilado en marzo de 2013) frente a Givenchy. Puede que al final un mismo proveedor marque sea el resultado de esta coincidencia.
El experto en lograr que las famosas deslumbren sobre la alfombra roja parece mirar al lado contrario que algunos de sus coetáneos. Si unos quieren bajar sus colecciones a tierra él prefiere subirlas a la Alta costura y la visión de otras marcas como Af Vandevorst. La escuela belga frente a cualquier intento accesible en los vestidos de fiesta, en las formas cruzadas, en los drapeados y en la manera de tratar los volúmenes.
Japón nos deja sus samuráis deconstruidos por piezas, como si se hubiesen vaciado y Givenchy solo se hubiese quedado con lo que le mola. El estampado asiático deja terreno a los colores y diseños africanos en una colección más otoñal que estival donde no falta el brillo ni el pelo.
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