La Pandemia de la Covid-19 provocó un aumento considerable en las compras online, acelerando así la digitalización. Cada vez son más los negocios que abren sus tiendas online, sin embargo con el nacimiento de nuevas firmas muchas de éstas pueden esconder un fraude. Para comprar de manera segura y sin problemas existen algunos pasos (o trucos) a seguir para saber si se trata de un negocio seguro. Nos hemos basado en los consejos de los expertos de Xataka y en los nuestros propios para poder crear esta guía rápida, fácil y sencilla.
Antes de comprar echa un vistazo a las opiniones de los usuarios
Es importante que cuando descubramos una nueva tienda y queramos comprar algo de allí busquemos referencias de otros usuarios. Reseñas de Google o Trustpilot muestran las opiniones de otros usuarios que ya han comprado en esa web. Si no hay ni una sola opinión de la marca en cuestión puede convertirse en el primer aviso de que esa firma no es de fiar.
Posee un certificado de seguridad SSL/TLS
Un certificado SSL es un estándar de seguridad global que permite la transferencia de datos cifrados entre un navegador y un servidor web. De este modo, este certificado autentifica la identidad del sitio web y nos garantiza que no estamos en un sitio falso. Si aparece un candado en la barra de la dirección nos certifica que se trata de una web segura. Además, si en la barra de direcciones aparece "https://" (y no "http://") sabremos que se trata de una versión mejorada del "http" convencional al que se le ha incorporado los protocolos de seguridad SSL/TLS (Secure Sockets Layer/Transmission Layer Security).
Las pasarelas de pago son un dato clave
La manera de pago de la web puede determinar si se trata de un sitio falso o no. Pagar con Paypal o tarjeta de crédito (o débito) nos da una cierta confianza ya que detrás de éstas existe un seguro de que, en el caso de que tengamos un problema, podremos reclamar la cantidad pagada. Sin embargo, huye de todas esas webs que tan solo permiten un pago a través de transferencia.
Hay que fijarse bien en los datos de la empresa
Un factor determinante a la hora de descubrir un fraude es fijarse en su política de privacidad. Allí tiene que aparecer el nombre de la empresa. Éstos suelen encontrarse en el footer o parte inferior de la web. Para saber que se trata de una página de confianza, la empresa mostrará datos como su nombre completo, NIF, dirección física o su teléfono. Aviso legal, contacto o la política de privacidad es otra información que determina la fiabilidad de la web.
Echa un vistazo a sus RRSS y los comentarios de sus seguidores
Las RRSS determinan qué clase de web tenemos delante. En muchas ocasiones los usuarios suelen mostrar sus quejas, problemas o alabanzas a través de los comentarios. Huye si tan solo encuentras comentarios positivos de usuarios con cuentas con 0 publicaciones (es decir, falsos). Hoy en día todo el mundo dispone de cuenta de Instagram o Twitter por lo que es más fácil saber si estamos ante una web segura. Además, es posible que en la web se muestren los iconos de sus redes sociales pero que éstos no enlacen con su perfil correspondiente.
La política de devoluciones nos ayudará a detectar el fraude
No existe ninguna política de devoluciones preestablecida, sin embargo éstas tienen que estar detalladas, tener coherencia y saber todos los pasos a seguir en caso que se pueda devolver la prenda (cómo se realizará la devolución de dinero, el tiempo límite para devolver un producto o los costes de esta devolución son un ejemplo).
Con el crecimiento del comercio online hay mucho fraude, es por eso que antes de comprar deberemos asegurarnos de que estamos ante una web segura. Además, plataformas de venta como Amazon o eBay ofrecen productos de vendedores particulares. Lo recomendable es que antes de comprar leamos bien el anuncio y nos fijemos en las valoraciones de otros usuarios.
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