Las colchas son un elemento muy decorativo en el conjunto de un dormitorio. Por eso es primordial saber elegir una, para esos días en los que el calor se va y comienza a entrar el frío, teniendo en cuenta que decora y es muy útil. Puede usarse tanto en primavera/otoño y verano e incluso en invierno como manta. Todo depende de la sensación de frío que tengamos, así usaremos la colcha solo una sábana o también con nórdico. Lo que sí que no cambia es que siempre quedará mucho mejor una cama con una colcha que sin ella y estos cuatro modelos de Ikea son la prueba fehaciente.
Esta colcha de color blanco roto con un motivo decorativo pespunteado en gris oscuro aporta un toque acogedor e informal a cualquier dormitorio. Es de algodón natural, tacto suave y combina fácilmente con otros cojines y productos de ropa de cama. Además, se puede utilizar tanto como colcha o como manta.
JAKOBSLILJA: Colcha, hueso/gris, 150x250 cm
Esta manta hecha de algodón muy suave en amarillo es el mejor complemento para relajarse, ya sea tirada en el sofá o en la cama. La trama doble crea un efecto ondulado que queda bien con los bordes crudos. El tejido es suave y ligero gracias también a la trama doble. Además, el algodón es un material natural suave que requiere pocos cuidados y se puede lavar a máquina.
VALLKRASSING. Manta, amarillo
Esta colcha abriga, es cómoda y decorativa. Permite renovar de un solo gesto cualquier habitación y, además, hace las veces de manta. Su suave tejido de algodón es agradable y confortable.
VÅRELD. Colcha, rosa claro, 230x250 cm
Esta colcha en color gris verdoso es una manera fácil de renovar el aspecto del dormitorio. Su tejido acolchado de poliéster te proporciona abrigo y calidez. Además, también puede hacer las veces de manta extra.
KÖLAX. Colcha, verde grisáceo, 150x250 cm
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Fotos | Ikea
