Clara Lago tiene una silueta esbelta y fibrada que delata su amor por el deporte. de hecho, no lo esconde, y desde el inicio del estado de alarma ha estado animando a sus seguidores de Instagram a ejercitarse en casa. “Porque no es un tema de salir de la cuarentena con o sin unos kilos de más, sino ver el deporte como un aliado que nos ayuda a crear una rutina, a generar endorfinas… a sentirnos bien en todos los sentidos, en definitiva”, defendió la actriz predicando con el ejemplo junto a una foto suya haciendo una sentadilla con pesas, mientras seguía indicaciones de su entrenadora personal a través del móvil.
Como la madrileña recordaba en sus redes, estos días "hay un montón de gente haciendo clases online de todo tipo" y tenemos mayor facilidad para encontrar una rutina que cubra nuestra necesidades personales. No obstante, ella se deja guiar por su amiga y entrenadora personal, Lorena, directora técnica de Boutique Gym, con la que en el pasado se ha dejado ver en varias ocasiones haciendo sus clases de spinning. Aunque la protagonista de Ocho apellidos vascos practica casi todos los deportes imaginables.
Desde hacer pilates en el estudio de su hermano en Malasaña, hasta salir a correr, pasando por bailar hip hop. Sobre todo, cuando no se encuentra en casa por alguno rodaje o tener que asistir a algún evento, Lago recurre al running y al TRX, un sistema de arnés con el que trabajamos en suspensión, movilizando nuestro propio peso corporal.
Practica ejercicio a diario, aunque sean simplemente 30 minutos. Para ella es un hábito cotidiano más, como desayunar todos los días. "Cuando ganas esa constancia te lo empieza a pedir el cuerpo. Te apetece y ya no te tienes que obligar", ha comentado la actriz en alguna ocasión.
Cuando la agenda le permite acudir a hacer pilates, una de sus maquinas favoritas es la Reformer, con la que se pueden hacer ejercicios tanto de entrenamiento básico como avanzado para trabajar un amplio abanico de músculos. En Instagram ella misma se ha mostrado usándola con la postura del barco. Un ejercicio muy intenso y nada fácil de realizar.
Solo hay que poner el cuerpo uve, con las piernas juntas y a 45 grados respecto al suelo. Además de la espalda recta e inclinada hacia atrás. Requiere de equilibrio y esfuerzo pero es una postura muy efectiva a la hora de trabajar la zona abdominal, la cadera y la espalda baja. Es decir, el core. Además, mejora la estabilidad y la alineación de la columna vertebral y aumenta el rendimiento deportivo.
Fotos | Joma e Instagram de Clara Lago.