Dare me, Rétame en castellano, es la serie de USA Network basada en el libro homónimo de Megan Abbott que ha llegado sin hacer ruido y se ha convertido en lo más visto en Netflix España en la última semana.
Nosotras también hemos sucumbido a su encanto oscuro y turbio y nos hemos enganchado a esta nueva obsesión de Netflix que se ha situado muy alto en muy poco tiempo, como ocurrió la semana pasada con Toy Boy.
Esta oscura serie, extrañamente adictiva, nos ha hecho no pensar en nada más, y hemos encontrado cinco razones por las que se ha convertido en el remedio perfecto para largos días de confinamiento.
Porque es una (oscura) serie de animadoras
Netflix apostó hace unos meses por una docu-serie en el que las animadoras del equipo Navarro eran las protagonistas absolutas. Tanto que se convirtieron en estrellas. Veíamos de primera mano lo que era para el equipo prepararse para los campeonatos de cheerleaders.
Por eso ver cómo Colette entrena a las chicas de Rétame para que se presenten a los regionales nos gusta tanto. Solo que en esta vez el equipo del instituto de una localidad del medio oeste norteamericano no estará tan unido y sus relaciones serán mucho más turbias.
Porque tiene toques de Euphoria
Una de las mejores cualidades de Euphoria, el drama juvenil de HBO que se convirtió en un must have del género, es que narraba la adolescencia sin paños calientes con sexo, drogas, odio, amor, amistad y cualquier sentimiento que cualquier adolescente puede sentir.
La envidia se palpa en esta nueva serie, pero también la nostalgia, la ambición o el amor no correspondido. Es intensa, como debe ser una serie de adolescentes, pero sin rozar la telenovela.
Porque comienza con un secreto que estamos deseando saber
En el primer capítulo de la serie se vislumbra un secreto desde el que arranca la trama tres meses antes. ¿Qué secreto es? Un asesinato, un suicidio, una violación, un secuestro… no sabemos lo que pasó, igual que en Élite no supimos quién era el asesino de Marina hasta el final de la primera temporada. La diferencia es que aquí no da saltos temporales, empieza tres meses antes y avanza de una forma irremediable.
Porque está protagonizada por mujeres
La historia se centra en tres personajes femeninos: Beth (Marlo Kelly), Addy (Herizen Guardiola) y Colette (Willa Fitzgerald). Como ocurriera con Westworld o Euphoria son ellas las que tienen la sartén por el mango en la serie, y es una buena noticia. Hay personajes masculinos, pero son relegados a meros secundarios en favor de que las tres protagonistas se conviertan en una obsesión.
Porque es mucho más que un drama adolescente
La culpa de que esta serie nos enganche la tiene sin duda el triángulo tóxico que existe entre las dos adolescentes amigas de siempre y su nueva entrenadora.
Esa obsesión que se respira de las tres por igual hace que se mezclen en una espiral de secretos, competitividad extrema, engaños y paranoias en la que rara vez sabremos quién es realidad la culpable, la que provoca el daño o la mala de la serie.
Las tres se alimentan y se convierten en la piedra angular de este drama para young adult y adolescentes que ya nos ha obsesionado.
Fotos | Dare me (Netflix)
