Sabemos que la alimentación es un pilar fundamental para la salud cognitiva, y son muchos los expertos e investigaciones que se han hecho al respecto. Unos buenos niveles de omega 3, vitamina K y ácido fólico mejoran la memoria y el desarrollo neuronal, por lo que si los incluyes en tu dieta, estarás haciendo mucho por reducir el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas, como la demencia o el Alzhéimer. Pero, hay otras investigaciones que también apuestan por la remolacha y su capacidad para cuidar de nuestra salud cerebral.
Se trata de una verdura que promueve la dilatación de los vasos sanguíneos, mejora la circulación y, por tanto, el funcionamiento del cerebro. De hecho, su consumo se vincula con la estimulación de las funciones del lóbulo frontal, el cual se vincula a la memoria y a la toma de decisiones.
Está compuesta por un 90% de agua y el resto son fibra, azúcares y micronutrientes como el potasio que es beneficioso para la tensión arterial normal, son ricas en hierro y en vitamina C, contiene un gran poder antioxidante debido a las betalaínas, que son las que producen su color granate tan característico y su alto contenido en óxido nítrico es el que le brinda ese poder vasodilatador, el cual promueve, como decíamos, que los vasos sanguíneos se dilaten y llegue más oxígeno a todos los tejidos.
Según publican en este artículo de la BBC, parece que el zumo de remolacha estimula la cognición y mejora la capacidad de tomar decisiones rápidas y su consumo se vincula con sus beneficios a la hora de mantener la salud del cerebro a medida que envejecemos y, en general, a mantener el cerebro más joven.
Según mencionan en el mismo artículo, Andy Jones, profesor de fisiología aplicada de la Universidad de Exeter en Reino Unido, que pasó más de 10 años investigando los efectos de la remolacha en el rendimiento deportivo, dice que la cantidad ideal recomendada para su consumo es de unas dos o tres remolachas medianas o una ración de zumo de remolacha por día.
"Descubrimos que lo que cuenta son alrededor de 6 a 10 milimoles (un milimol de cualquier sustancia se define como el peso molecular o atómico de esa sustancia en miligramos) de nitrato, y eso es el equivalente a 2 a 3 remolachas (…) Pero me imagino que si continuaras comiendo remolacha en un nivel más bajo, pero de forma más crónica, tendrías tipos de efectos similares", explica, según recoge el artículo.
Fotos | tomateoignons Polina Tankilevitch de Pexels
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