Los mayores de 52 años que se encuentran en desempleo son uno de los grupos de la población que más vulnerables en esta situación. La edad junto con otras circunstancias como que las empresas son reticentes a contratar personas mayores debido a motivos como la brecha digital o porque son más 'lentos' que los trabajadores jóvenes a la hora de aprender tareas nuevas son solo algunas de las barreras que impiden que las personas en edades más avanzadas puedan encontrar empleo.
De ahí que el paro de larga duración sea uno de los mayores problemas de nuestro país. Las autoridades, conscientes de esta situación, ofrecen ayudas tales como una atención mayor en cuando a la búsqueda de empleo, así como el subsidio para mayores de 52 que, tiene tres particularidades que son las que, algunos dicen, desincentivan la búsqueda de trabajo por parte de estas personas.
El subsidio para mayores de 52 años ofrece una cantidad de 480 euros al mes, es decir, 6.720 euros al año (a fecha de 2024), ininterrumpidamente, y algunas 'ventajas' para aquellos que están más cerca de la jubilación podrían ser las causantes de pausar la búsqueda de trabajo:
- Por un lado, solo se tiene en cuenta los ingresos del candidato y no los de la unidad familiar.
- Por otro lado, no tiene una duración determinada, por lo que la cuantía siempre será la misma hasta que bien, se encuentre trabajo o bien, se llegue a la edad de jubilación.
- Y, por último, este subsidio permite cotizar a la Seguridad Social por un 125% de la base mínima, lo que se traduciría en un empleo de mínimo 20.000 euros al años, para que la cotización fuera similar.
Por este motivo, algunos expertos, tal y como explican en este artículo, dicen que estos tres motivos serían suficientes para que una persona en esta situación no se viera incentivada a buscar empleo.
Y lo demuestran haciendo referencia a los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), donde dicen que muchas personas que cobran este subsidio declaran no estar buscando trabajo.
Por tanto, ¿hasta qué punto se deberían incentivar a estas personas a la búsqueda de empleo? ¿Debería haber más acciones y movimiento por parte de las autoridades para que la búsqueda de empleo en esta franja de la población fuera mayor?
Fomentar a jubilación activa para los sénior por cuenta propia que quieran seguir activos, permitir indemnizaciones parciales por parte de la empresa ante la finalización del contrato del sénior, poder deducir al 100% de los gastos de formación y educación de los sénior, la reducción de las tarifas de autónomos, incentivar a los emprendedores sénior autónomos… son algunas de las ideas que se proponen desde el III Mapa de Talento sénior, que aboga por la convivencia entre el talento sénior y el talento joven para poder combinar experiencia y conocimiento de los mayores con la innovación de los más jóvenes. ¿Llegará el día que pueda ser una realidad?
Fotos | Tima Miroshnichenko Pexels
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