Cuando hablamos de cuadernos reutilizables no nos referimos a una pizarra en la que escribir o a un telesketch, sino a un cuaderno de los que todos tenemos en la cabeza pero con una particularidad: puede borrarse sin dificultad y volver a utilizarlo como si nada. Además, suelen tratarse de cuadernos inteligentes, que permiten dar un paso más y digitalizar lo escrito (o dibujado) en un documento. Y además, ahorrarás en papel, así que tu lado más ecológico estará más que contento. Así funcionan los cuadernos 2.0: reutilizables, ecológicos e inteligentes.
La magia del papel sintético
Everlast es una de las marcas que tiene un cuaderno reutilizable. Su Rocketbook (desde 39,99€) está fabricado con papel sintético, de poliéster, que permite que se escriba con cualquier bolígrafo la línea Pilot FriXion. Y se borra con una gota de agua y una gamuza. La marca asegura que es de uso infinito, pero la duración dependerá como es lógico del uso que le des. No deja de ser un papel, así que si al escribir aprietas de más, dejarás marca, y tras muchos, muchos borrados es posible que la hoja empiece a resentirse. Pero habrás ahorrado muchos más cuadernos de los que puedas imaginar.
Esta marca tiene otro tipo de cuaderno reutilizable, si eres de los que por ejemplo, quiere usarlo como cuaderno de notas para todo un año. Si huyes de la idea de tener que borrarlo con gamuza y agua, el Rocketbook Wave (desde 28,99€) tiene otro sistema de borrado: meterlo en el microondas. Se borrarán todas las páginas a la vez en el mismo tiempo que te prepararías un té caliente. La tinta en el cuaderno se vuelve transparente a 60º, así que un par de minutos en el micro y voilá, cuaderno nuevo sin necesidad de comprarte otro. Lo malo es que solo funciona un número limitado de veces, cinco.
En el caso de los InfiniteBook de Ecobook (disponibles desde 14,20€ en Amazon), por ejemplo, es más sencillo. Escribes y borras tantas veces como quieras porque el acabado es muy similar al de una pizarra blanca. Las hojas llevan un recubrimiento plástico para que el papel no absorba la tinta. Lo mismo pasa con los cuadernos reutilizables de Whynote (desde 29,90€) que asemejan el acabado de las típicas pizarras blancas.
Los Newyes (desde 19,90€ en Amazon) cuentan con borrado en caliente (con un secador por ejemplo podrías borrarlo sin problemas) o con borrado clásico, con gamuza húmeda y nos gustan porque el acabado en cuero es muy original, aunque no dispone de app propia para la digitalización como los de Everlast.
El 2.0 en los cuadernos reutilizables: la digitalización
No es solo que estos ecobooks permitan reducir el gasto de papel, sino que son prácticos porque permiten, en su mayoría, la digitalización del documento. Con un simple gesto con el móvil, podrás tener en la hoja de su cuaderno en formato pdf o jpg. Este concepto es especialmente práctico para aquellos a los que les gusta dibujar a mano alzada, por ejemplo.
Los smartbook de Everlast, por ejemplo, tienen en la parte inferior de las hojas varios iconos que pueden configurarse para que cada uno vaya a un sitio diferente. Con el bolígrafo haces una equis sobre el icono al que quieras que vaya. Abres la aplicación Rocketbook y al pasar la cámara por encima el documento se escanea, edita y guarda en el destino señalado. Es compatible con Evernote, Drive, Dropbox, Slack, Box, Onenote, email o iCloud.
En los casos en que no exista aplicación para ello, como los InfiniteBook de Ecobook, los de Whynote o los Newyes, puede servirte la app de CamScanner, que es un escáner en el smartphone. Se hace una foto desde la app y esta la digitaliza, recorta y edita para que tenga el mejor acabado posible y desde ahí, te la manda por email, la sube al Drive o a la nube, o la comparte a través de otros medios como whatsapp.
Lo mejor y lo peor de los cuadernos reutilizables
Evitas tener que comprar cuadernos tan a menudo, reduces tu impacto medioambiental porque limitas el consumo de papel y puedes disponer de un cuaderno como siempre, pero con la ventaja añadida de la digitalización. Por otro lado es cierto que son más caros que los normales. Depende del modelo, rondan entre los 20 y los 40 euros, pero si calculas el precio de lo que supondría la misma cantidad en cuadernos de un solo uso, estás ahorrando. Como ocurre con las bombillas LED, nos parecen caras pero a largo plazo salen baratas. Los cuadernos reutilizables también funcionan como una inversión.
La mayor pega que tienen es que no todos los bolígrafos funcionan para todos los cuadernos reutilizables. Es necesario que tengas el bolígrafo recomendado por cada fabricante, para que el cuaderno te dure el mayor tiempo posible y amortices bien esa inversión de la que hablábamos.
Los nostálgicos seguimos escribiendo en papel, aunque la tecnología nos persiga y hayamos dejado de utilizarlo para todo lo que necesitamos decir. Y esta forma, más ecológica, más responsable con el medio ambiente y más práctica, es ideal para los melancólicos que nos negamos aún a que nuestra mano suelte el bolígrafo para siempre.
Foto| Everlast