Según un estudio publicado por la Universidad de las Naciones Unidas, la basura electrónica aumenta, a nivel global, un 8% cada año. Y es que solo el 20% de la basura electrónica se recicla, a pesar de contener materiales como el cobre, la plata o el oro que pueden recuperarse y reutilizarse. Esto, sumado al auge y la rapidez con las que las nuevas tecnologías se quedan obsoletas, lo ha convertido en uno de los grandes problemas medioambientales a resolver. Una cuestión que puede abordarse de diferentes formas, como esta colección de joyas y bisutería creadas con metales preciosos procedentes de móviles.
Detrás se encuentra la empresa Back Market, especializada en el reacondicionado de productos electrónicos y el taller neerlandés Nowa (por "no waste"). Uniendo sus fuerzas, y bajo el nombre de G.OLD, han presentado una colección especial de piezas fabricadas con oro, plata y cobre que ve la belleza en los residuos.
La colección se compone de un colgante geométrico en forma de circulo que viene bañado en oro, una llave bañada en plata y otro colgante rectangular bañado también en plata. Todos ellos incluyen un cordón ajustable y han sido fabricados en su totalidad con materiales sostenibles. Su precio oscila entre los 39,95 y los 49,95 euros.
Los materiales para fabricar estas piezas se obtienen a través de Closing the Loop, una organización que recoge teléfonos usados de los vertederos en África para reciclarlos en Europa. Y es que, según esta organización, el 70% de los dispositivos terminan en mercados emergentes, donde no se dispone de la instalaciones de reciclaje necesarias para cuando llegan all final de su vida útil.
Los móviles son unos de los dispositivos que más contribuye a este tipo de contaminación. Un estudio de la Unión Europea publicado el año pasado determinó que 700 millones de móviles se encuentran en territorio europeo sin ser usados ni reciclados. Un dato significativo si tenemos en cuenta que de los smartphones sería posible recuperar casi 16.000 kilos de cobre, 350 de plata y 35 de oro.
La diseñadora holandesa Eva Schreuder se encarga del resto y, además del diseño sobre el papel de las mismas, es responsable de toda la producción manual de las piezas. Se pueden adquirir a través de la web de Back Market, donde no están disponibles solo para completar nuestros outfits sino también para crear conciencia sobre el problema que suponen los residuos electrónicos, evitar su aumento desmedido y fomentar el reaprovechamiento de sus componentes porque, por muy viejo que sea, deshacerse de un móvil es tirar a la basura metales preciosos.
Fotos | Unsplash y Back Market.