El estrés es tan habitual en nuestro día a día que de algo puntual ha pasado a considerarse un hábito, y para desgracia de quienes lo sufrimos, es un hábito que puede acelerar el envejecimiento según los expertos de Vitónica.
Según un estudio publicado la revista Cell Metabolism recientemente, que existan factores estresantes puede incrementar la edad biológica, acelerando el envejecimiento y aumentando el riesgo de morbilidad y mortalidad. Pero no nos llevemos las manos a la cabeza (aún), porque el mismo estudio afirma que “la edad biológica se recupera cuando la situación estresante desaparece y el organismo se restituye del estrés sufrido”.
Así que solo tenemos que reducir esos niveles de estrés. Lo malo es que la vida nos pasa por encima en muchas ocasiones y no siempre sabemos cómo evitar que el estrés nos invada. Por suerte Harvard sí.
A través de Harvard Health, la Universidad de Harvard ha publicado una guía llamada Manejo del estrés: mejore su bienestar al reducir el estrés y aumentar la resiliencia, que reúne una serie de recomendaciones para reducir el estrés en nuestra vida laboral.
Igual que cuando trabajamos el desarrollo personal, es importante que los cambios sean progresivos y que no intentemos pasar de cero a 100 de la noche a la mañana. Por eso vamos a decirte cinco trucos de Harvard para reducir el estrés en el trabajo, que puedes aplicar en tu día a día de una forma sencilla.
Trucos para reducir el estrés en el trabajo
Empieza el día un poco antes para no ir corriendo desde primera hora
Solo 10 ó 15 minutos podrían marcar la diferencia. No te decimos que hagas como los grandes magnates tecnológicos y te levantes a las 4 de la mañana, sino que pongas el despertador diez minutos antes para que tu día no empiece corriendo, sino de una manera más calmada. Ese tiempo puedes emplearlo por ejemplo para desayunar tranquilamente mientras te pones al día con las noticias.
Priorizar, la clave para reducir el estrés
Harvard nos dice que observemos nuestras prioridades y deleguemos o descartemos las tareas innecesarias. Es importante que antes de comenzar la jornada seamos capaces de tener una lista de tareas en las que se distinga la prioridad de cada una de ellas, porque el tiempo de trabajo es finito y tal vez no lleguemos a todos.
Por eso lo ideal es planificar el trabajo en segmentos y asignar a las tareas diferentes prioridades. Como cuando Mónica Geller hacía las listas de tareas e iba tachando. Las que no sean realmente necesarias para hoy, ponlas al final de la lista.
Divide y vencerás
Es posible que solo tengas un proyecto y es en muchas ocasiones abrumador ver el conjunto, así que partiremos de pequeños pedazos más accesibles, dividiendo el proyecto en microtareas. Algo parecido a la premisa del libro Hábitos Atómicos del que te hablamos aquí, que hacía las tareas más pequeñas para evitar por ejemplo, la procrastinación.
Haz descansos regulares
No, no hablamos de bajar al bar a desayunar 10 veces, sino de levantarte y estirar las piernas habitualmente, dar un paseo hasta la máquina de agua o simplemente charlar unos minutos con un compañero. Hacer descansos regulares nos ayuda ha reducir el nivel de estrés.
Además, está demostrado científicamente que los pequeños descansos ayudan al cerebro a aprender cosas nuevas porque cuando se para, el cerebro realiza una "repetición" mental rápida, reforzando la habilidad recién adquirida.
Reduce el consumo de azúcar refinado
La Universidad de Harvard explica que el azúcar provoca un colapso en el estado de ánimo y la energía, que empeora los síntomas del estrés, así que comerte un bollito a media mañana no es lo más aconsejable. En cambio los frutos secos sí son una recomendación adecuada para tomar entre horas. No solo porque son más saludables, sino porque afectan positivamente al estrés.
Fotos | Thought Catalog Christina @ wocintechchat.com y freestocks en Unsplash
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