Viajar al pasado es posible y no, no hace falta montarse en el coche de Marty McFly, así que deja de buscar tu DeLorean. Para ello solo has de darte una vueltecita por la geografía española, donde hay pueblos medievales tan increíbles como Montfalcó Murallat, en Lleida, una villa que, literalmente, es una fortaleza.
Según la página web de Cataluña, este rincón de su comunidad encuentra sus orígenes en la Reconquista y en concreto en el siglo XI. ¿Lo mejor? Su estado de conservación. Y sí, como decíamos, su muralla se mantiene intacta.
Para acceder a Montfalcó hay que hacerlo por el Portal Villa Closa, el único que permite la entrada a este pueblo. Una vez dentro, caminarás por sus calles empedradas y porticadas, tal y como señalan en la web de Turismo de Cataluña.
A día de hoy, dentro de la fortaleza hay unas 15 viviendas que aprovechan precisamente los muros de la muralla como pared trasera. El Portal Villa Closa desemboca en la plaza central de este idílico lugar que ha llamado la atención de National Geographic y también la nuestra, colándose en nuestra lista de pueblos medievales más bonitos de España.
Como no podía ser de otro modo, aunque la población total de la zona apenas supere los 20 habitantes, en la villa hay una iglesia, la de San Pedro de Montfalcó, de estilo románico. Al igual que sucede con las casas, el templo se construyó también aprovechando una torre defensiva de la fortaleza. A pesar de sus orígenes, a lo largo de los siglos la edificación ha ido sufriendo renovaciones, de ahí que en la misma confluyan también los estilos gótico y renacentista.
Un plan imperdible
Si visitas Montfalcó Murallat, desde la web de Turismo de Cataluña recomiendan disfrutar de la ruta de los Castillos del Sío de la Segarra, para que te empapes bien de historia en plena naturaleza.
Este recorrido sigue el cauce del río Sió, un elemento clave en la Reconquista. El trayecto coincide con las líneas defensivas que se crearon a finales del siglo X y principios del XI. Lo puedes hacer en coche, a pie o en bicicleta.
Una parada técnica en boxes
Y por supuesto, al igual que comentamos al descubrir las bondades del pueblo de Teruel que parece recién salido de La Toscana, a nosotras no nos va eso de pegarnos una escapada sin disfrutar de la gastronomía de la zona.
En concreto, según la página web de Turismo de Cataluña, las parrilladas de carne con escalivada son un must, pero el cordero al horno tampoco tiene desperdicio. Al igual que el conejo a las hierbas o la perdiz estofada. Una cocina muy de proximidad. Tampoco pueden faltar las patatas viudas y las habas segarrenses.
Y como no podía ser de otra forma, el final llega de la mano de un buen postre, que en Montfalcó Murallat eso es sinónimo de los sares. Y para cerrar, un licor a base de tomillos de la zona.
Fotos | Página web de Turismo de Cataluña
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