Aunque la fama se la lleven, principalmente, Andalucía y la costa española, Castilla y León tiene auténticos rincones preciosos. Solo hay que tomar Burgos y Ávila como ejemplos. Sin embargo, tampoco conviene olvidarse Palencia. Esta pequeña capital de provincia que cuenta con menos de 80.000 habitantes pero donde podemos encontrar verdaderas joyas de la arquitectura y platos de su gastronomía únicos. La cocina tradicional se compone de platos contundentes elaborados con las mejores materias primas, ideales para combatir los fríos días de invierno.
La Mejillonera
Calle los Soldados, 7 (34001)
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En esta cervecería de Palencia se comen las mejores patatas bravas, según cuentan locales y visitantes. La materia prima es de primera calidad y tiene fama también de de contar con un servicio atento, rápido y cordial. Además de su delicia terrenal, no te puedes perder los mejillones, preparados de infinidad de maneras distintas. Eso sí, su situación al final de la calle mayor hace que el bar suela estar muy concurrido.
El trompicón
Calle Mayor Antigua, 102 (34005)
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Uno de esos bares que encontrarás siempre repleto de gente local y mucho ambiente. Además, el precio es muy asequible y las raciones estupendas. Además, también se dice de ellos que tienen unos bocadillos espectaculares. Y todo en pleno centro de Palencia. En definitiva, un sitio de barrio por excelencia, pequeño, familiar, con una gran variedad de carnes.
Bar Javi
Calle Mayor Antigua, 32 (34005)
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Un nombre muy común para un local de comida tradicional de muy buena calidad pero barata. Un local de los de toda la vida en el que comer un rico menú del día como en casa. Rodeado, además, de un personal atento y terminando la comida con un café estupendo. Ven si buscas variedad de platos y raciones.
Foto de portada | Turismo Palencia
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