Como en las películas de tirón comercial, en los Oscars siempre hay una segunda parte y no es otra que la ya mítica fiesta que la revista Vanity Fair organiza cada año. A esta segunda feria de las vanidades acuden estrellas de fulgor semejante pero de otras profesiones, como la música o la moda. Y las que repiten y acuden raudas tras la gala, lo suelen hacer con cambio de vestuario incluido.
Desde Jessica Biel hasta Cameron Díaz, Amanda Seyfried, Tom Ford, Taylor Swift, Liv Tyler, Naomi Watts y la mismísima Madonna con su hija Lourdes. También se dejó ver por el lugar la diseñadora L´Wren Scott, diseñadora del vestido lucido por Penélope Cruz, con cuyo estilismo comprendemos un poco mejor el porqué del vestido de nuestra Pe.
Cameron Díaz, discretita para las galas de la alfombra roja de Oscar pero sexy y espectacular para la correspondiente a la fiesta de la revista más “vanidosa”.
Muy desacertada Amanda Seyfried, con un tono que no favorece su piel blanquecina, un pelo que tampoco realza su belleza y un sujetador a la vista que no comprendemos muy bien qué hace ahí.
Ella es, L´Wren Scott, la diseñadora del vestido de Penélope Cruz , y que al parecer no está recibiendo críticas muy halagadoras. ¿Comprendemos ahora el motivo del escote de Penélope Cruz? Su corte es igualito al de nuestra Pe aunque sus brillos emanan colores diferentes.
No obstante Mick Jagger, pareja de la señorita Scott, está tan encantado como nuestro Ja de llevar semejantes redondeces a su vera.
Tom Ford junto a Rita Wilson, esposa de Tom Hanks.
Las dos rubias más rubias se vistieron de un burbujeante color champán. Ideales tal cual para un anuncio de Freixenet, una en corto y otra en largo.
La moda estuvo presente no sólo en los vestidos de las asistentes sino en los propios invitados. Si la representación masculina la puso Tom Ford, la femenina Diane Von Furstenberg, premio trendencias de oro a la “it designer”.
Naomi Watts a quien no le hizo falta aparecer como actriz en Cisne Negro para vestirse como uno. Bellísima por donde quiera que sea analizada.
El mundo de la música también estuvo presente gracias a la reina del dance floor, Madonna y su hija Lourdes.
Mi imagen favorita y es que la debilidad que tiene una por Steven Tyler, líder de Aerosmith, y por su hija Liv Tyler es casi enfermiza. Siendo más objetivos demasiado negro y demasiado cerca.
Selena Gómez y Justin Bieber ¿el detalle del pañuelo rojo de él en la solapa es fruto de la casualidad o todo fue premeditado?
Y el triunfador de la noche junto a la maestra de ceremonias. Colin Firth y Anne Hathaway en una bella estampa propia de todo un rey.
Via| Guardian, The daily beast
En trendencias| Oscars 2011
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