Los preciosos retratos a color de la serie Pearly Gates de la fotógrafa Anastasiya Lazurenko, un canto a la amistad femenina y a los momentos compartidos con la gente que más queremos, además de transmitirnos belleza, la intimidad o la alegría son el mejor homenaje que le ha hecho a su amiga fallecida por la anorexia.
Cuando su amiga Valeria, una de sus modelos favoritas, falleció en el 2013 tras haber luchado durante años contra la anorexia, la fotógrafa Anastasiya Lazurenko primero se sintió culpable y responsable, por formar parte de una sociedad que alababa el culto al cuerpo y a la delgadez, apostando por estereotipos de belleza imposibles de conseguir. Y segundo, se prometió a sí misma que nunca iba a retocar sus imágenes. Jamás. No iba a dejar que con su trabajo contribuyera a mantener esa estética ideal y autodestructiva.
Y en su proyecto Pearly Gates es evidente que ha mantenido esta promesa. Cero retoques. Máxima pureza. Durante cinco años ha estado retratando a grupos de amigas y conocidas en los bosques de Ucrania, en comunión con la naturaleza, nadando, paseando y compartiendo confidencias. Capturando momentos únicos, bien a color, bien en blanco y negro, para celebrar por todo lo alto la amistad femenina. Y las cosas bellas por sí mismas, sin influencias externas que nos empujen hacia una sola forma de considerar la belleza.
Una reflexión visual de lo auténticamente importante, de como sobran los filtros y los enfoques cuando lo realmente importante es la libertad, la independencia, la felicidad y la madurez suficiente para apreciarlo todo en la debida manera.
Fotos| Anastasiya Lazurenko
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